“Mañana platicamos”, responde Kiko sobre violencia preelectoral

El Gobernador del Estado de Baja California, Francisco Vega de Lamadrid se mostró evasivo sobre el ambiente de inseguridad y delitos del alto impacto que han afectado a la entidad en la antesala electoral. Al mediodía de este domingo, personal de seguridad de Estado escoltaron al mandatario quien arribó en una camioneta tipo Suburban blindada. Acompañado de su esposa, Brenda Ruacho y del hijo de ésta, el gobernador emitió su voto en la casilla 1105 instalada en la escuela Juan de la Barrera en la Colonia Buena Vista. Luego de introducir el sufragio en la urna, Francisco Vega afirmó que la jornada electoral trascurre “nada fuera de la normalidad… estamos nosotros muy pendientes”. Además de explicar que se instaló un grupo de coordinación este domingo en el Centro de Gobierno en Mexicali, integrado por el CISEN (Centro de Investigación y Seguridad Nacional), La Secretaría de Gobernación, la Policía Federal, la Procuraduría General de Justicia (PGR) y el Gobierno del Estado. “Esto ha sido muy importante porque estamos al pendiente y coordinados todos los niveles de gobierno” sentenció. “En San Quintín –dijo el mandatario– no hay ningún reporte ahorita, todo va bien por allá”, Sobre los niveles de inseguridad que se han registrado en los últimos meses, el reportero de ZETA preguntó: “¿Gobernador, cómo puede o pudo haber afectado la violencia e inseguridad en esta jornada?”. –“El lunes nos platicamos. Ahorita es el día de las elecciones y ahorita yo creo que no”. ZETA, insiste: “Gobernador, pero como cree que la violencia y la inseguridad pueda afectar la participación ciudadana en Baja California, los delitos del alto impacto en el Estado”. “Ahí mañana platicamos”, respondió y subió a su camioneta escoltada.