Grupos de hombre guerrilleros agredieron las ciudades y causaron mil desmanes, quemaron autos y naves. La ciudad estaba solad por ser el Día del trabajo, la policía resguardaba las acciones de su pueblo. Los asaltantes en cambio presumían su poderío, quemaron varios camiones y con carga grandes trailers. Los trabajadores en el barrio no encontraban el transporte, como era un día festivo había pocos en la calle. Lo que sobraba ese día fueron narcoguerrilleros, como nadie los molesta demuestran ser poderosos. Que resuelvan esos hechos los políticos y candidatos, mostrando su poder ahora como lo presumen en campaña. Vicente Martínez Méndez Tijuana, B. C.