El senador Manuel Camacho Solís falleció a los 69 años, en la Ciudad de México, a consecuencia de un cáncer cerebral. Político serio de las últimas décadas del siglo pasado, con su actuar sentó las bases para la alternancia política en el país. En Baja California, Camacho Solís fue el responsable de desactivar el llamado “Quinquenio Infame”, como se refiere la historia a los cinco años de gobierno de Xicoténcatl Leyva Mortera, a la postre, el último gobernador priista electo en el Estado. Don Jesús Blancornelas, amigo personal de Camacho Solís, lo relató así en su libro “Una Vez Nada Más”, producido por Editorial Océano y presentado en la Ciudad de México, precisamente por Camacho Solís: “El poder mareó a Xicoténcatl a tal grado, que quiso imponerle candidatos a Carlos Salinas de Gortari, cuando ya era el escogido del PRI para 1988. La tragedia empezó cuando el aspirante presidencial llegó a Baja California en campaña, y enojadísimo, suspendió los actos programados, porque ni priistas ni nadie asistieron. “Unos decían que fue maniobra del gobernador; otros, que una forma de rechazar al sistema y a los dos desgobiernos de Roberto de la Madrid y Xicoténcatl. Rechazo que retumbó en el centro de las urnas, cuando el voto bajacaliforniano le dio el triunfo a Cuauhtémoc. “Por eso, cuando Carlos Salinas de Gortari llegó a la presidencia, le cortó la cabeza a Xicoténcatl; utilizó a Manuel Camacho Solís para que ‘comisionara’ al sobrino de Miguel Alemán a un cargo inexistente en el Banco de Comercio Exterior en Estados Unidos. Luego, lo mandó de agregado a la Embajada mexicana en Portugal. “Maquiavélico, Salinas lo retiró de la función pública con el pretexto de que no rindió cuentas a la Contraloría cuando dejó un puesto y luego otro; fue una factura costosa de por vida imborrable, que pagó Xicoténcatl por permitir la derrota priista de Salinas”. Hasta Baja California viajó Camacho a finales de 1988 para sacar a Xicoténcatl del Gobierno del Estado. Manuel Camacho Solís fue miembro del Partido Revolucionario Institucional desde 1965 hasta el segundo lustro de la década de los noventa. Fue en dos ocasiones secretario de Estado, la primera con Miguel de la Madrid Hurtado (1982-1988) como titular de Desarrollo Urbano y Ecología, y la segunda ocasión con Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) como secretario de Relaciones Exteriores. En el inter fue regente de la Ciudad de México, posición desde la cual sirvió de operador político al Presidente Salinas. En noviembre de 1993, cuando se estilaba la pasarela de políticos presidenciables, Camacho formó parte de la lista corta sobre la cual elegiría Carlos Salinas de Gortari a su sucesor. Se nombraba también a Luis Donaldo Colosio Murrieta, a Pedro Aspe Armella, a Ernesto Zedillo Ponce de León, entre otros. Confiaba Camacho en la palabra de Salinas. Juntos habían construido el sistema político que a la fecha rige al Gobierno de la República, reformando la estructura de las secretarías para hacer eficiente la administración. Pero el 23 de noviembre de 1993, Salinas decantaría a Luis Donaldo Colosio Murrieta, quien había ocupado el PRI y era titular de la recién creada Secretaría de Desarrollo Social. La historia quedó escrita. Colosio fue asesinado en Lomas Taurinas el 23 de marzo de 1994, cuando Manuel Camacho Solís tenía meses encabezando los trabajos para lograr la paz en Chiapas, luego del alzamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, consumado el 1 de enero de ese año. Las diferencias entre Salinas, Camacho y Colosio fueron públicas. La enemistad política fue en el mismo grado de la relación laboral que tuvieron años atrás en la construcción del proyecto de nación. La muerte física de Colosio significó la muerte política de Camacho. Y el inicio del desprestigio de la gestión salinista. Un año después, Manuel Camacho Solís renunció al PRI. Se retiró de la política activa, pero mantuvo el ejercicio del pensamiento político, la conferencia y la academia. En 1999, ya en la época que había anticipado como de tiempo para la transición política, instauró el Partido del Centro Democrático. En el año 2000 contendió por la Presidencia dela República bajo las siglas del PCD. No logró convocar a las masas. Lo suyo era la ideología política. Al final de su vida fue diputado federal y senador de la República, convocado por el Partido de la Revolución Democrática, al que no perteneció. Fue apoyo de Andrés Manuel López Obrador en su carrera presidencial y maestro de Marcelo Ebrard cuando le dio espacio en la regencia del Distrito Federal. Manuel Camacho Solís fue uno de los políticos reformadores más importantes de la historia contemporánea, desde las posiciones que ocupó como gobierno, asesor e ideólogo de la política. Economista por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Doctor Honoris Causa por la Universidad de Chiapas y miembro de El Colegio de México, recibió un homenaje póstumo, de cuerpo presente, en la Cámara de Senadores. En paz descanse.