Luego de varias denuncias ciudadanas que alertaban sobre la presencia de animales en peligro de extinción como un jaguar en el restaurante Habana Banana, en La Bufadora, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) aseguró de manera precautoria a cuatro ejemplares de vida silvestre. Los inspectores detectaron faltas al trato digno y respetuoso hacia un jaguar, una pantera, un león africano y un mono capuchino. Los animales eran exhibidos en el establecimiento, y los dueños cobraban al turismo por obtener una imagen junto a tres felinos y al primate sin tener autorización. En atención a diversas denuncias ciudadanas, en las que se alertaba de la exhibición de los animales, personal de esta dependencia federal efectuó una visita de inspección al sitio en cuestión para verificar el cumplimiento de lo establecido en la autorización SPA-PIMVS-EP-0006-BC/13 emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT). Se observó que dicha autorización sólo permite el espectáculo público con ejemplares de vida silvestre para las actividades de mantenimiento, exhibición, educación ambiental y aprovechamiento no extractivo del jaguar pinto (Panthera onca). Sin embargo, durante la inspección se observaron que el establecimiento poseía varias jaulas en las que se exhibía un jaguar pinto (Panthera onca) macho de 2 años de edad; un jaguar melánico o pantera negra (Panthera onca) hembra de 10 meses de edad; un león africano (Panthera leo) hembra de 5 meses de edad; así como un mono capuchino (Cebus nigritus) macho, de aproximadamente año ocho meses. También se encontraban en vitrinas un pitón burmes (Python molorus bivittatus) de 2.5 metros de largo y 3 ejemplares de pitón bola (Python regius). Si bien al momento de la inspección el visitado presentó la documentación que acredite la procedencia legal de todos los ejemplares de vida silvestre exhibidos en el restaurante, se detectaron algunas irregularidades. Entre las anomalías se encuentran que las jaulas no tenían las características necesarias para los ejemplares (ubicación, medidas, bebederos, lugares para la postración, descanso y estiramiento) y algunos animales estaban encadenados y sometidos a niveles altos de música y ruido. Asimismo presentaban visibles signos de estrés por el permanente contacto con los visitantes. Además, el inspeccionado no presentó los informes anuales correspondientes a los años 2013 y 2014; el Plan de Manejo del Predio o Instalación de Manejo de Vida Silvestre de forma confinada y fuera de su hábitat natural (PIMVS); y la autorización que lo faculta para el aprovechamiento, explotación, posesión, exhibición, y toma de fotografías con ejemplares de vida silvestre. El jaguar pinto, jaguar melánico, león africano y mono capuchino, fueron asegurados y se procedió al traslado de los ejemplares al Parque Zoológico Parque del Niño ubicado en el municipio de Ensenada, en el Valle de Guadalupe. Por las dimensiones del jaguar pinto, éste se quedó en depositaría provisional del visitado. El Jaguar es una especie enlistada en la NOM-059-SEMARNAT-2010, en la categoría de “Peligro de extinción” (P) y el león africano está considerado como especie amenazada dentro de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).