Entre los diputados del Congreso del Estado que no le liberan el presupuesto y Arnulfo de León Lavenant que dejó a todo su personal -incluidos aviadores- en la Comisión Estatal de Derechos Humanos, no han dejado a la joven Melba Olvera Rodríguez, desarrollarse en el cargo de presidenta de esa Comisión, para lo cual fue electa por los legisladores bajacalifornianos. Resulta que del presupuesto que supera los 33 millones de pesos para los Derechos Humanos, cuando Melba tomó posesión el 1 de junio, ya había un sobregiro de unos 6 millones de pesos, incluso de los 12 mil pesos para viáticos que le corresponden a la titular de la Comisión para el mes en turno. De León Lavenant solo le dejó 6 mil (en mayo se gastó lo de ese mes y el 50% del mes siguiente). El problema es que los diputados que la eligieron, particularmente los priistas, la han dejado sola y sin dinero. Además, permitieron que a las diez personas que llegaron con Arnulfo de León -más aviadores-, el ex procurador de los Derechos Humanos no les solicitara la renuncia, y que se los endilgara a Melba, que así, sin dinero y sin equipo, no ha podido arrancar su gestión. Entre los que no quisieron renunciar y esperan que la presidenta de la CEDH los corra para cobrar liquidación, se encuentran Francisco Castro Trenti e Irma Contreras de Badiola, quienes llegaron a invitación de Arnulfo y no pertenecen al equipo de Olvera, se niegan a dejar la chamba. Aparte, el ex procurador, por cierto investigado por las transas en lo que fue la PDH, también dejó enquistados en plazas a su suegro, Max Medina, con un sueldo de 12 mil 300 pesos, y a su hijastro Israel Lozoya Medina con un pago de 12 mil 557 pesos mensuales. También a su hijo, amigos y compadres, que antes que tomara posesión Olvera Rodríguez, se les conocía como aviadores. Así, entre los que no quieren renunciar a pesar de no ser de su equipo, los herederos que dejó De León Lavenant y la falta de recursos que el Congreso no le autoriza, la joven Melba poco o nada puede hacer por los Derechos Humanos en Baja California. Dicen que quienes tienen atorados los dineros, son los legisladores panistas, aferrados a que antes de soltar la lana, la presidenta de la CEDH contrate a María Isabel Herrera, quien compitió por el cargo, pero no fue seleccionada. Ahora sí, qué abusivos con Melba. Ya déjenla trabajar…