En Baja California, en el período 2009-2010, la precipitación pluvial en promedio fue de 220 milímetros y, conforme han pasado los años, consistentemente ha disminuido a 130 milímetros anuales. De acuerdo al Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), los pronósticos indican que en la región lloverá cada vez menos. Las disminuciones en futuros años podrían ser hasta en un 20 por ciento. El municipio de Mexicali registra la menor precipitación (50 milímetros) en todo el país. A esta situación se suma la inconsciencia de quienes desperdician a diario el líquido vital y aquellos que no pagan el servicio en tiempo y forma. De acuerdo a la Comisión Estatal de Servicios Públicos en Tijuana (CESPT), de 525 mil cuentas residenciales, solo 120 mil saldan sus adeudos mensuales puntualmente; el resto lo hace con atrasos de tres a cinco meses o más. Cabe destacar que en cartera vencida, actualmente aparecen 74 mil cuentas. Ante una emergencia por la escasez de agua en Baja California, se anticipa un problema de desabasto, advirtió el investigador del Departamento de Geofísica Aplicada del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE), doctor Rogelio Vázquez González. Si bien es cierto, el agua que se destina para Baja California proviene del Río Colorado y se tiene un tratado binacional para contar con el líquido, se contempla la posibilidad de disminuir el porcentaje del suministro, así lo dijo a ZETA el titular de la CESPT, Alfonso Álvarez Juan. De entrada, afirmó que la situación de California, Estados Unidos, y de Baja California es diferente, pues el problema básico del estado vecino se da en el Valle de San Joaquín (con vocación agrícola), donde no están recibiendo agua debido a la sequía y falta de nevadas. Afirmó que el tema del uso correcto del agua lo tiene implementado la dependencia desde 1990, y tiene que ver con el uso responsable, sin embargo, Álvarez no precisó los impactos directos y los ahorros generados. “Por plan de gobierno tenemos meta de llegar a 95 mil multiplicadores, que son los niños en escuelas. El Día Mundial del Agua (22 de marzo) tomamos protestas a 400 niños como guardianes del agua que llevaran el mensaje. En restaurantes de Tijuana distribuimos en los manteles para que los niños los coloreen y los adultos tomen conciencia. El director de la CESPT mencionó que el Gobierno Federal emitió un decreto el 9 de abril de 2015, en el cual la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) determina que hay 388 municipios en sequía donde se encuentran los cinco municipios bajacalifornianos; a raíz de eso instalaron una mesa de trabajo para determinar acciones que lleven a multiplicar el buen uso y re-uso, por lo que en dos semanas esperan lanzar un programa de socialización. Agregó que en Tijuana, el consumo es de 169 litros por día, y a nivel nacional, de 350 litros. Aunque quizás no sea lo óptimo, sí advierten un uso responsable, pero no por parte de todos los ciudadanos. En torno al número de cuentas, el funcionario estatal indicó que tienen 604 mil usuarios, de los cuales 524 mil (79%) son residenciales, el resto es industrial, comercial y de gobierno. Del total de las cuentas residenciales, solo 120 mil paga puntualmente, el resto se atrasa por varios meses. Alfonso Álvarez expuso que la estrategia del gobierno estatal en torno a la generación y ahorro del líquido es el establecimiento de una desaladora (250 litros por segundo) en Playas de Rosarito, además de la generación de estudios para utilizar el agua de re-uso, mientras que al sector industrial le pedirán hacer más eficientes los procesos. Por lo que respecta a Tijuana, en la colonia Libertad se aplicó un plan piloto con la instalación de una válvula que reduce el suministro en un 20%, arrojando efectos positivos. Para instalar 100 mil válvulas se necesitan aproximadamente 120 millones de pesos, cantidad que ha sido solicitada al Gobierno Federal y están en espera de la respuesta. En tanto, el titular de la CESPT reconoció que de ser necesario tandear el agua en la ciudad, lo llevarán a cabo. El difícil escenario En diciembre de 2014, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) generó un estudio de proyecciones de la mayor sequía en el vecino Estado de California en los últimos mil años, empero, las gráficas muestra mayor deterioro en la parte Norte de México, y anota que en el año 2060 el país sufrirá escasez de agua, siendo la frontera norte la más afectada. De acuerdo al organismo, el país recibe el 10% del agua del Río Colorado, que usan los estados del Noroeste (principalmente Baja California y Sonora), cuenca que además dota de agua a un estimado de 40 millones de estadounidenses. Por su parte, el investigador del Departamento de Geofísica Aplicada del CICESE, Rogelio Vázquez González, citó que existe una problemática con recursos hidráulicos en la región, y que probablemente tiene que ver con cambios climáticos a nivel mundial. Lo estamos viviendo, hay información donde nos indican que la precipitación ha ido disminuyendo de 2009 a la fecha, podría decir que de 2007, tenemos menor recarga de nuestros mantos acuíferos. Por otro lado, desde 2012, al Norte de la frontera se publicaba un escenario de sequía, eso conlleva una reducción de recursos hidráulicos. “Es un problema serio; tenemos solamente el acueducto del Río Colorado-Tijuana, en caso que tenga un problema por efectos de temblor o falla, no hay infraestructura que lo supla. No podemos estar sin un plan b, que pueda en dado caso hacer frente a una falla o escasez. Si se quedan sin líquido en nuestras casas por más de 24 horas, se convierte un problema”, expresó. Ante tal situación, es necesario buscar alternativas como el tratamiento de aguas para el uso en la agricultura y la desalinización del mar, que no es otra cosa que la evaporación. Sin plan de contingencia El senador Víctor Hermosillo Celada dijo a ZETA que Baja California no cuenta con un plan de contingencia ante la demanda del líquido en mayores cantidades, por lo que se debería tener un plan de emergencia, al no descartare la situación que pudiera darse a futuro. Agregó que ante la sequía que se ha presentado desde hace cuatro años en California, y dado a la disminución del agua que tiene el Río Colorado que también abastece al vecino Estado, se podría limitar el líquido a Baja California. El racionamiento en la distribución del agua tendría que ser igual para las entidades que la reciben, y podría ser del 10%. “En México no se previenen las cosas. Hasta que no se tiene el problema hacen algo, cuando se pueden hacer tomar acciones con anticipación”, consideró. Según el legislador, el problema fundamental es que en el país no se cuenta con planes de contingencia y existe un constante desperdicio de agua por parte de los ciudadanos, sobre todo, no tienen la cultura del pago para que con esos recursos, se generen obras necesarias de infraestructura. Por otro lado, opinó que de darse las reducciones, la parte más dañada sería la agricultura, debido que el 91% del agua que se suministra en Baja California, debe destinarse a las tierras de cultivo. Consumo en agricultura deberá reducirse En torno al tema, el investigador del Departamento de Estudios Urbanos y Medio Ambiente de El Colegio de la Frontera Norte (COLEF), doctor Óscar Alberto Pombo López, detalló que California tiene un sistema complejo de reservas y acueductos interconectados para suministrar agua a sus ciudades, que en teoría, permitiría amortiguar alrededor de diez años de precipitaciones menores a la media regional y, cuando se llega a cierto nivel de las reservas, se activa la alerta. “El consumo urbano de California es muy superior al de Baja California, en números rápidos, una persona promedio de San Diego usa la misma cantidad de agua que una familia tipo de Tijuana… y en California hay personas que consumen varias veces el promedio, especialmente para mantener grandes áreas verdes en propiedades lujosas, la mayoría de las medidas van dirigidas a ese sector”, argumentó. Se debe tener en cuenta que la mayor parte del agua es consumida por la agricultura (aproximadamente el 80%) pero, a diferencia de Baja California, por el sistema de permisos de derechos de agua vigente, no es posible reducir el consumo del sector, por lo que las ciudades compiten en desventaja con el sector agrícola. “El consumo promedio por habitante de Tijuana se sitúa alrededor de 140 litros por día, el límite inferior de lo que la OMS (Organización Mundial de la Salud) considera el suministro necesario para mantener una población saludable, es decir, que no se puede reducir el consumo por habitante de la ciudad, so riesgo de generar condiciones insalubres para la población” Pombo López recordó que el agua que recibe el Estado desde el Río Colorado es producto de una negociación binacional, los volúmenes son fijos e inamovibles, como en casi todas partes del mundo. “A nivel Estado, el Río Colorado proporciona aproximadamente el 65% del total, mientras que el 35% es extraído de acuíferos y algunos ríos de muy bajo caudal, como el Río Tijuana. Aproximadamente el 90% del agua que consumen Tijuana, Tecate y Rosarito, proviene del Río Colorado”. — ¿Estamos en riesgo de quedarnos sin el líquido?, se le preguntó. “Hay que ver qué es lo que Usted considera quedarse sin el líquido, ¿de quién está hablando, de los agricultores o de las ciudades? Es posible que en un futuro sea necesario reducir los volúmenes que hoy se destinan a la agricultura para divertirlo a las ciudades, pero con una reducción del 10% del agua que hoy se destina a la agricultura, se puede duplicar la población urbana del Estado”. Respecto a los tandeos de agua, el investigador de El COLEF opinó que es una respuesta parcial a un problema de inadecuada infraestructura, solución momentánea que no vale la pena utilizar por tiempo prolongado, ya que al poco tiempo, todo mundo tiene tinacos que compensan cualquier reducción. Al igual, comentó que Tijuana recibe del Río Colorado la mayor parte del agua (cerca del 90%), en tanto que las presas son para almacenar excedentes y aprovechar el agua de las lluvias; sin embargo, la Presa “Abelardo L. Rodríguez” en Tijuana luce escuálida. Para la provisión de agua a la ciudad, la clave es el acueducto que comunica con Mexicali, el cual se encuentra muy cerca de ser utilizado en su totalidad, y a futuro será necesario ampliar la capacidad del mismo. La sequía de California Por cuarto año consecutivo, California entra en un estado de sequía y, en busca de generar medidas de ahorro para hacer frente al problema, el Estado ha decretado medidas de ahorro del agua desde el viernes 15 de mayo. La portavoz de la Junta Estatal de Recursos del Agua de California, Miriam Barajas, informó a ZETA que en 2014, el gobernador Jerry Brown declaró un estado de emergencia y autorizó a la Junta de Agua del Estado de California, tomar las medidas pertinentes para enfrentar la situación climatológica. Por lo anterior, el plan de conservación se retomó en el presente año y, si bien termina en 2016, a futuro podría ser permanente. Éste se asocia a la temporada de calor, que arribó desde la primavera de 2015 y se aplica a negocios, proveedores y ciudadanos (38 millones), con lo anterior se busca una reducción general del 25% de agua que se convertiría en una disminución de 1.2 millones de acres (un pie de acre es igual a 325 mil 851 galones) de pies de agua en los siguientes nueve meses. La entrevistada abundó que tienen diversas fuentes primarias para hacer frente a las demandas de agua, como son el agua importada, agua de mar desalinizada, agua no potable reciclada, así como agua potable reciclada y la conservación de la misma. La Oficina de Recursos Hidráulicos de California, habría decretado acciones de ahorro del líquido que se relacionan con nueve tasas de reducción, las cuales oscilan entre el 8 y hasta el 36%. El programa de ahorro en California establece las siguientes restricciones para los ciudadanos Uso de agua para lavar la calle y banquetas Escurrimientos cuando sea con agua potable El uso de mangueras sin boquillas de cierre para lavar coches El uso de agua potable en elementos fuentes que no tengan una bomba para que recircule Uso de riesgo al aire libre durante y 48 horas después de la precipitación mensurable Restricciones para los negocios Restaurantes y otros establecimientos de servicios de alimentos, solo pueden servir agua a los clientes bajo petición Hoteles y moteles deben ofrecer a los huéspedes la opción de no tener toallas y ropa lavada diario Lo que los proveedores de agua deben hacer Imponer restricciones en el riego al aire libre Notificar a los clientes acerca de filtraciones que están dentro del control del cliente Entregar un informe mensual sobre el consumo de agua del cliente Informar sobre el cumplimiento y aplicación de las medidas Agua con la que cuenta Baja California Volumen disponible 3,584.8 mm3 Uso consuntivo 89.4% Remanente 10.6% Utilización del agua disponible en Baja California Agrícola 91.4% Urbano 7.7% Pecuario 0.6% Industrial 0.3% Multas De acuerdo a la Dirección de Servicios Públicos Municipales (DSPM), en el periodo de mayo de 2014 a mayo del presente año se han efectuado 939 multas por derrame de agua por parte de los ciudadanos que residen en Tijuana. El monto total por dichas infracciones asciende a 385 mil 181 pesos. El importe promedio de cada multa es de 410 pesos.