La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), informó que la madre biológica y padrastro del menor de dos años, Jason Gael, asesinado el jueves 14 de mayo en Playas de Rosarito, no están detenidos porque no se ha determinado que las heridas que tenía hayan sido provocadas por ellos. No hubo flagrancia ni confesión de los sospechosos. Ese día, aproximadamente a las 7:30 de la mañana, el Hospital General del quinto municipio se comunicó a la subprocuraduría de la zona para informar sobre el ingreso del niño, con dificultades para respirar y señas visibles de golpes. Cuando personal de la PGJE llegó al hospital, el menor ya se encontraba sin vida, tenía el abdomen abultado, la nariz y labio superior con hematomas, así como otras lesiones antiguas de pies a cabeza, entre ellas quemaduras de cigarro, recientes y anteriores, múltiples lesiones en el cuerpo, principalmente en el costado derecho del tórax. Además, se le observó un hematoma con días de haber sido provocado. El Servicio Médico Forense (SEMEFO), determinó que la causa de la muerte fue una contusión profunda de tórax y abdomen, un estallamiento hepático. De acuerdo a la fiscalía, la madre y padrastro del niño estaban en el Hospital General al momento de la llegada de su personal, por los que se presentaron ante un Agente del Ministerio Público para que rindieran su declaración, aunque están en libertad. Como no hubo flagrancia, la PGJE tendrá que realizar otras investigaciones, así como pruebas periciales que se integrarán en la averiguación previa 1206/15/207 abierta por Homicidio Calificado.
En caso de menor muerto en Rosarito, aún no hay detenidos
Autor(a)
- Publicidad -