Sales de casa temprano pues el trabajo te llama y regresas por la noche muy cansado de la espalda. Aunque tienes mucho sueño por la mañana te marchas, para seguir tu tarea que al parecer no se acaba. Nunca vas de vacaciones mientras que la vida pasa y te quedas trabajando para que los otros vayan. Al imaginar tu vida tan solitaria y cansada, mi corazón por ti llora y te cobijan mis alas. Eres un ser afanoso que cada día trabaja y te gusta lo que haces aunque no descansas nada. Por las noches te recuestas con tristeza en la mirada, anhelando el par de brazos y la boca de tu amada. Una paloma te mira al pasar por tu ventana, porque sabe que tú sufres y quiere sanar tu alma. 20 cartas, 20 alumnos La paloma se detiene y susurra con voz baja, que te quiere ver alegre pues ella mucho te ama. Lourdes P. Cabral San Diego, CA
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