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sábado, octubre 12, 2024
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El maldito centralismo

Más de 370 mil niños de preescolar, primaria y secundaria están sin recibir instrucción académica en Baja California. Los profesores están en paro y esta es la tercera semana. Empezaron escalonados, por secciones, por escuelas, pero ahora ya es definitivo. Su clamor es que el Gobierno Federal les debe dinero, les retrasa el pago (aunque algunos esta quincena la recibieron antes), no hay orden ni respecto en la Federación en calidad de patrón de los maestros. Antes el Gobierno de la República enviaba vía recurso federal el dinero al Gobierno del Estado, y éste pagaba a los maestros. Desde tiempos de Ernesto Zedillo Ponce de León el traspaso de dinero fue inestable, lo mismo creo que indistintas ocasiones, hubo un déficit con el gobierno bajacaliforniano. Más de mil 500 millones de pesos adeudaban a la Baja California. Hoy día, Enrique Peña Nieto decidió y así le aprobaron, que el centralismo imperara también en esta materia. Y a partir de este año fiscal, sería la Federación directamente quien pagara a los maestros. Su desorden se ha agravado. A muchos maestros les llega retrasado el cheque. A otros les cambiaron las condiciones de pago, a unos más les cobran un préstamo que ya hace tiempo pagaron. Total, un desastre con la centralización del recurso para pagar a los maestros. En los paros, manifestaciones y volanteo de sus demandas, los profesores han encontrado el apoyo de la ciudadanía. Piden entre otras cosas, que el pago de la nómina regrese a ser responsabilidad del Estado, y no del FONE (Fondo de Aportaciones de Nómina Educativa) como sucede a partir de este año. Además, los maestros del SNTE solicitan se les paguen los 732 millones de pesos por distintos conceptos, que se pague a los maestros interinos lo que se les adeuda, alrededor de 35 millones de pesos; que regresen por lo menos cuatro condiciones que con la centralización de la nómina les quitaron, entre ellos el bono diferencial de retiro a más de cinco mil maestros jubilados a razón de 222 millones de pesos, además la prima de antigüedad por la que suman 335 millones de pesos más, que el Gobierno del Estado tramite con tiempo la petición de recursos para los pagos puntuales, También, reconocer el alta de base a 310 maestros por 204 millones de pesos, 2.5 millones de pesos por carrera administrativa, 14 millones 265 pesos que se adeudan a 2 mil 76 trabajadores, entre otras cuestiones. La deficiente labor administrativa del Gobierno de Baja California a cargo de Francisco Vega de Lamadrid, por un lado, y el centralismo del Gobierno de la República en manos de Enrique Peña Nieto, tienen la educación paralizada en Baja California. Esta grave situación no había sucedido en este Estado, los problemas que se tenían cuando la Federación no enviaba el dinero a tiempo, los solventaban las anteriores administraciones estatales, pagando con otro recurso para no dejar sin su pago a los maestros, lo cual ciertamente los llevó a tener un déficit millonario. ¿Qué hacen en el Gobierno de Enrique Peña Nieto con el dinero? Evidentemente no lo están administrando bien, ya el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray dijo que habría que ajustar el presupuesto y ajustarse ellos a “administrar” los bienes de la Nación con menos dinero. Es increíble cómo en México la clase del Gobierno es sumamente poderosa, los partidos son partidos ricos, los pobres se siguen acumulando por millones, y en el caso de los maestros ahí está el ejemplo de Baja California, mal pagados y abollados sus derechos laborales. El Gobierno de Peña es un gobierno escaso de talento, escaso de recursos, pero que vive en la opulencia del poder. En esa condición, lo suyo es centralizar lo más que puedan. Ya lo hicieron con el dinero para obras a los municipios, ya no les entregan el dinero para que tanto la comunidad como el Ayuntamiento decidan en qué lo invierten, sino se los mandan como dicen, ya etiquetado para equis o ye proyecto que se genera en el centro y no en la necesidad de quienes viven acá. La política centralista que distingue al Gobierno de la República se ve reflejada en la necesidad de Peña de convocar al centro del país a los Gobernadores, para cualquiera de sus actos de ornato. También se observa en la decisión por ejemplo, de incrementar el IVA en la frontera sin observar primero las necesidades de esa región y no las ocurrencias del centro. Pero vaya, ni cobrando más impuestos con nuevas y centralistas políticas fiscales, el dinero le alcanza al Gobierno Federal. El centralismo priísta está creando problemas, y en el caso de los maestros en paro en Baja California, está afectando la educación de los niños y adolescentes. ¿Qué tantas malas noticias podremos soportar de parte de una autoridad federal que no termina de demostrar lo insensible, injusto e incompetente que es?

Autor(a)

Redacción Zeta
Redacción Zeta
Redacción de www.zetatijuana.com
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