Especial – Ciudad de México.- “Estado de Censura”, informe anual de Artículo 19 fue presentado la mañana de este martes 24 de marzo en el Museo Ex Teresa Arte Actual –ubicado en el Centro Histórico– que lució repleto y donde se incluyó la participación de cinco periodistas mexicanos que han sufrido agresiones por su labor informativa y donde cada uno planteó sus impresiones. Durante el acto se mostraron los videos e impresiones de los cinco reporteros que ejemplificaron los ataques sufridos por la prensa mexicana durante 2014. Entre éstos el caso de Edwin Cache, corresponsal del Diario de Yucatán en Seye, un municipio indígena ubicado en las afueras de Mérida, golpeado salvajemente por policías municipales, Adrián López, Director del diario El Noroeste, agredido a balazos en Culiacán; Karla Silva reportera de El Heraldo de León en Guanajuato, quien fue violentada salvajemente en las oficinas del diario; Silvia Hernández de Veracruz, también hostigada, y Norma Madero del semanario Luces del Siglo, de Cancún, Quintana Roo, hostigada desde el gobierno estatal. Había otro en la lista, pero su lugar quedó vacío, se trata de Pedro Cache, un periodista maya del municipio de Carrillo Puerto, quien se encuentra encarcelado desde el 30 de agosto del 2014 acusado de sabotaje desde el gobierno estatal. Durante el año 2014 Artículo 19 documentó 326 ataques contra periodistas y medios de comunicación y de acuerdo a esos datos, en el país cada 26.7 horas se agrede a un periodista durante la actual administración de Enrique Peña Nieto, cifra casi duplicada en relación a la administración federal que encabezó el panista Felipe Calderón. Los datos recabados por la organización internacional de defensa del trabajo periodístico detallaron en su informe que 48 por ciento de las agresiones contra comunicadores son cometidas por funcionarios públicos, la mayoría policías. “El estado no funciona, quien debería brindar protección se convierte en el principal perpetrador de los ataques, eso crea el clima de miedo que se respira en cualquier redacción del país”. Al final fue presentada la periodista Carmen Aristegui –recién despedida de MVS Radio–, quien ante el micrófono hizo un recuento de lo que está pasando en nuestro país en cuanto a la situación del periodismo mexicano. “La calidad de una vida democrática se mide por sus libertades, por la posibilidad de criticar, de señalar, de informar, de investigar, de decir, de recorrer el mundo de la información, de las críticas. México tiene un conjunto de luces y muchas sombras”, manifestó la periodista mexicana, quien en apenas diez minutos al micrófono, hizo una rápida pincelada de la realidad mexicana Explicó, “estamos ante un vendaval autoritario”, hecho de un gobierno que llegó a la presidencia del país de manera altamente cuestionable, con un déficit de legitimidad de origen, que a lo largo de dos años ha transformado radicalmente las estructuras legales y constitucionales del país, con reformas que no se debatieron. “Un gobierno que se ha topado con situaciones que no ha logrado resolver –dijo la periodista– mencionando temas como el de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y la incapacidad hasta este momento para explicar qué fue lo que sucedió”. Aristegui también expuso cómo ha sido la respuesta de una buena parte de la sociedad al mostrar el desacuerdo colectivo con el hostigamiento, la cerrazón, las amenazas, las intimidaciones, los despidos, lo que ocurre en todo el territorio nacional, a lo que caracterizó como un panorama sumamente preocupante. Dijo que todo esto mostraba una intolerancia desde el propio poder y una incapacidad para aceptar la voz de la disidencia, al no poder asimilar que las críticas son ingredientes irrenunciables para aspirar mínimamente a una vida democrática, “estamos hoy ante un estado de cosas altamente preocupante”, agregó Aristegui. La periodista habló de un aparato político-gubernamental que cuesta mucho y que es ineficiente, que no da las respuestas correctas, en el sentido apropiado y que a la vez está atravesando una crisis por la caída en picada del precio petrolero, un reajuste forzado de las finanzas públicas y un conjunto de situaciones que no han podido enfrentar cabalmente. “Y a la hora de encontrar a las voces que lo critican, que lo señalan, a la hora de encontrar el debate público que exige rendición de cuentas, la reacción es autoritaria, virulenta, de intolerancia, lo que es altamente preocupante porque ocurre en todos los niveles del ejercicio periodístico”. Sobre el tema del despido de ella y su equipo del noticiero de MVS Aristegui dijo que seguirán dando la batalla, el proceso legal, aunque mencionó que “”podrá ser una piedra a la luna, pero hay que darla”. El día previo al informe, comunicadores de todo el país junto con expertos en temas relacionados con el periodismo analizaron y discutieron rubros como internet y el espacio público, protección y cobertura y fuerzas de seguridad, las tendencias del periodismo nacional e internacional y la libertad de expresión desde un enfoque global.