Como parte de los recorridos de vigilancia en Áreas Naturales Protegidas (ANP), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) detectó a tres cazadores furtivos armados en la zona de la Reserva de la Biosfera Sierra La Laguna, al parecer introduciéndose de manera ilegal. La dependencia federal hizo el levantamiento del acta correspondiente y se sigue de cerca el proceso administrativo y jurídico. Benito Bermúdez Almada, director de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), aceptó que especies protegidas sí están amenazadas por esta práctica ilegal. “Se han detectado algunos ilícitos y de inmediato se deben reforzar las acciones, recordemos que el año pasado tuvimos el incidente de cacería furtiva en la Isla del Carmen. Nosotros llevamos a cabo tres denuncias en materia de vida silvestre ante la Procuraduría, y las especies donde hubo mayor incidencia fue en venado, borrego Cimarrón”, refirió. La detección de los cazadores se lleva de cerca por autoridades de PROFEPA, las cuales reconocen que las especies más afectadas por estas prácticas son el borrego cimarrón y el venado bura. Y es que su cornamenta es muy demandada por coleccionistas. Asimismo, PROFEPA recordó el incidente ocurrido a mediados de 2014, cuando tres cazadores furtivos fueron detenidos por denuncia de la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) de Isla de Carmen, municipio de Loreto. Se les aseguró un cuchillo de caza, 12 cartuchos útiles, dos armas de fuego tipo rifle 7 milímetros marca Remington con mira telescópica y un 22 mm marca Ruger; así como dos ejemplares muertos de borrego cimarrón. “La Norma Oficial Mexicana NOM-059, establece que deben conservarse esos recursos porque están en protección especial, es el caso del borrego cimarrón, del venado bura, que tenemos en Baja California Sur, que es una subespecie que solo puede ser aprovechada a través de UMAs. En los casos que se han presentado, de inmediato llevamos a cabo un proceso de denuncia ante la PROFEPA, un peritaje”, se informó. En las comunidades cercanas a las ANPs y de crianza, se crearon guardias comunitarias en apoyo a las autoridades que vigilan la protección de especies en riesgo, además de que se elaboró “un convenio de colaboración PROFEPA-CONANP y un programa de vigilancia comunitaria, en el cual la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas conforma grupos de vigilantes de las comunidades. Se les da un curso de capacitación y recursos, es decir, recursos para gasolina, alimentación, equipamiento, radiocomunicación, uniformes”. Al momento de la detención de los cazadores, se les encontraron armas, sin embargo, contaban con permiso para portarlas, y aún se analiza si tenían autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) para la caza de especies protegidas.