Se le cumplió el caprichito del danzón millonario a la Primera Dama en el estado Señora Brenda Ruacho de Vega. Ya dieron el banderazo para la construcción del CRIT y se edificará aquí en Tijuana. Ya se asignó el predio, se apalabró, litigó y sabemos dónde se planificará tal centro de salud. En la “pechuga” famosa, bajando de Otay a la 5 y 10, a la izquierda, junto al edificio extranjero y rentable del consulado americano. Todos sabemos cuál será su fin. Pero las generaciones venideras en Tijuana ya no nacen por esa zona. Las parejas que se casan se van y buscan su casa y les toca lejos de Otay. El Niño, bulevar 2000, Los Venados, Santa Fe, allá por la UABC, de Las Palmas y más lejanías tijuanenses. Solo personas de escasos recursos solicitarán tales servicios del CRIT. ¿Cuánto les costará el traslado y qué tanto tiempo a esos futuros pacientes para llegar a la “pechuga” y consultar en el futuro CRIT? Por la zona del próximo CRIT ya son escasos los nacimientos, son ya segunda y tercera generación. Lo pujante de alumbramientos es la zona Este de Tijuana y más lejos. Será un viacrucis que parejas traigan a sus hijos de tal lugar a cita o consulta al CRIT, y si van en el transporte público peor. Necesitan transformar tal acceso al caprichoso CRIT. Quién eligió tan céntrico lugar. Contubernio gubernamental, mano negra en traspase de predio. Por qué allí. Ya ven el centro recreativo El Trompo, igual quedó en zona millonaria, junto al centro mundial de comercio. Mal y errónea ubicación del futuro CRIT. Así como consiguió la Señora Ruacho de Vega los millones, así indagó y señaló con su dedo índice aquí mero edificaré mi polémico CRIT. ¡Sí! Tantas décadas y ese predio tan solo hoy en un dos por tres sale agraciado, y lo canalizan en zona peligrosa y de caótico acceso para quien taiga a un niño tijuanense a consulta. Su ubicación, creo está mal elegida. Futuros pacientes verán lejos tal destino del CRIT. Habiendo otras zonas más accesibles y con el grueso poblacional en vertiginoso crecimiento, y donde se concentra casi un medio de habitantes y con volatilidad de crecimiento. Está como el centro infantil y de consulta Hospital de las Californias, manejado por poderosos y cara la consulta. Así será el CRIT, de ornato, y nada de soluciones médicas a mis futuros compatriotas tijuanenses nacidos muy pronto. Esperemos qué pasará, si cumplirá su objetivo o un berrinche más del panismo bajacaliforniano, aquí en mi Tijuana. Leopoldo Durán Ramírez Tijuana, B. C.