Juan Francisco Osuna Ramírez, alias “El Baquetón” y Juan Manuel García Hernández, alias “El Ponky”, fueron presentados como los autores materiales del homicidio de Rogelio Alonso Castillo, “El 300”, el 10 de marzo de 2014 en el Hotel Segovia en la Zona Centro de Tijuana. De acuerdo la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), los dos hombres asesinaron a “El 300”, quien era identificado como líder del narcomenudeo en las delegaciones San Antonio de los Buenos, La Mesa y Zona Centro de la ciudad. Ya en mayo de 2014, la PGJE había presentado a Daniel Alejandro Rivas Espinoza, como el asesino de “El 300”, de acuerdo a sus propias confesiones. Sin embargo, en un comunicado de prensa, la Procuraduría informó que son “El Baquetón” y “El Ponky”, quienes junto con Gustavo Hernández Gutiérrez, “El Guacho” o “El Kaibil”, ejecutaron al líder narcomenudista. Osuna Ramírez y García Hernández, ambos de 29 años, manifestaron que el 10 de marzo de 2014, llegaron al Hotel Sevilla en el Centro de Tijuana para asesinar a “El 300” por un “ajuste de cuentas” entre bandas rivales. Según la Subprocuraduría contra la Delincuencia Organizada (SCDO) – perteneciente a la PGJE – las declaraciones de testigos y de los indiciados, coinciden en que ubicaron a su víctima cuando ésta se encontraba en una habitación del hotel junto a una mujer. Para subir hasta la habitación, “El Baquetón”, originario de Navojoa, Sinaloa y “El Guacho”, informaron en recepción que entregarían un dinero al huésped. Mientras tanto, “El Ponky”, nacido en Tijuana, se encontraba en la esquina del hotel para vigilar si llegaba la policía y advertir a sus cómplices. Los dos presuntos homicidas subieron las escaleras del hotel, con un arma de fuego calibre 9 milímetros. Una vez frente a la habitación, “El Baquetón” tocó la puerta y cuando “El 300” le abrió la puerta, le disparó en tres ocasiones. Luego, “El Guacho” –consignado desde julio de 2014- efectuó tres disparos más. Las heridas, le provocaron la muerte instantánea a “El 300”. Según informa la PGJE, luego del homicidio, los dos homicidas pagaron la cantidad de 500 pesos a “El Ponky” por servir de “halcón”, para después de huir a bordo de un vehículo marca Oldsmobible. A los dos indiciados, se les relaciona con los mismos homicidios que también confesó Daniel Alejandro Rivas Espinoza, de 30 años de edad y quien fue presentado por la PGJE ante medios de comunicación como el asesino de “El 300” y de ocho personas más, el 30 de mayo de 2014. Entre los principales asesinatos, se encuentran el de Miguel Sánchez González, identificado como narcomenudista, quien el 25 de mayo de 2014, fue ejecutado en la calle Coahuila y callejón 5 de mayo en la Zona Norte. Los disparos le costaron la vida en el Hospital General. También, se les imputada el homicidio de Ulises Agnia Tapia Navarro, quien fue asesinado cuando salió de un gimnasio en el centro comercial MacroPlaza, el 28 de mayo de 2014. Así como la muerte de Víctor Reyes Aguilera, el 13 de febrero de 2014 en la Zona Norte, entre la calle Primera entre Artículo 123 y Cristóbal Colón. Sin embargo, en las averiguaciones previas 1576/14/203, 165/14/201 y 56/14/201, la PGJE no informa si Daniel Alejandro Rivas Espinoza, alias “El Flaco”, continúa como indiciado. Por estos motivos, el 29 de enero de 2015, se giraron órdenes de aprehensión urgentes en contra de Juan Francisco Osuna Ramírez y Juan Manuel García Hernández, por el delito de homicidio calificado. Los dos hombres se encuentran internados en la Penitenciaria del Estado de La Mesa para enfrentar sus debidos procesos en el Juzgado de Primera Instancia Penal.