Policías municipales asignados en la Zona Centro, se dedicaban todos los días a detener narcomenudistas. Particularmente en la Zona Norte tenían harto trabajo. Desfachatados en el Callejón Coahuila y sus calles aledañas, ya los vendedores de droga ni se molestan en ocultarse para ejercer su ilícito negocio. Los agentes ven, la mayoría, para otro lado. Uno de los policías explicó el motivo: “De pronto nos sorprende una llamada diciendo ‘bájenle de huevos, somos Los Aquiles y aquí controlamos nosotros… tenemos comprados a sus jefes’”. Lo grave es que las llamadas las recibieron los oficiales a sus números personales, a sus teléfonos celulares. Y explican que aparte de sus familias y amigos, los números telefónicos privados los tienen registrados los jefes de Sección de la Municipal y los mandos superiores. Otra vez la maldita corrupción en la Municipal de Tijuana, se quejan policías que sí quieren servir a la ciudadanía pero entre sus superiores y “Los Aquiles” no los dejan.