A las 11 de la mañana del martes 3 de febrero, el abogado y maestro Daniel Solorio regresó a las aulas de la Facultad de Derecho de la UABC en Mexicali, después de un injustificado receso a raíz de su despido el 13 de marzo del 2012, hace tres años. Expulsado por el rector Felipe Cuamea, tuvo que salir éste de Rectoría para que el abogado cachanilla pudiera regresar a estar frente a sus alumnos, aunque para esto no solo fue necesaria la decisión de la Junta Especial Numero 5 de Conciliación y Arbitraje –esa que se encarga de los conflictos laborales de los universitarios– sino además tuvo que venir una decisión federal y aun así esperaron dos meses más, hasta que saliera Cuamea. De acuerdo a datos obtenidos por transparencia, en los cuatro años de la anterior administración en Rectoría se presentaron 91 demandas laborales, 56 de académicos y 35 de administrativos, la mayoría de las cuales aún están en proceso.