Pese a la voz de alarma que por momentos se ha lanzado respecto a casos de delincuencia, la delegación de El Porvenir, en Ensenada, sigue siendo un lugar tranquilo y seguro, a decir de autoridades y residentes de esa demarcación. Incluso hay quienes afirman que los robos han disminuido en el último año y medio, precisamente en lo que va de la actual gestión del alcalde Gilberto Hirata Chico, oriundo de ese poblado ahora convertido en uno de los principales destinos dentro del Valle de Guadalupe y la Ruta del Vino. Delitos comunes hay, robos también, y aunque son pocos, los involucrados los cometen una y otra vez porque lo que está fallando es la investigación y la denuncia. Es decir, a los mismos malandros se les detiene un día sí, y otro también, porque simplemente no se les turna al Ministerio Público en tiempo y forma. Los hurtos comunes son de herramientas de trabajo, alguna bicicleta, cajas de vino, alimentos y, el más frecuente, el robo de cableado, cometido este último por adictos, porque si algo ha incrementado es el narcomenudeo y consumo de drogas como el cristal y la marihuana, sobre todo en la juventud de poblados como El Porvenir, Francisco Zarco y San José de la Zorra. Recién se reunieron miembros de los vitivinicultores de El Porvenir con autoridades municipales, encabezadas por Enrique Villarreal Montemayor, secretario de Seguridad Pública de Ensenada, quienes acordaron medidas muy básicas para enfrentar la inseguridad y abatir a los pocos ladrones que los perjudican. La autoridad policial se comprometió a implementar operativos sorpresa con mayor regularidad, como toda medida para reforzar la vigilancia. Pero eso sí, fueron muy reiterativos en insistirle a los productores del poblado, así como a sus residentes, que denuncien todos y cada uno de los casos, porque esa es la gran falla. Las razones por las que las denuncias nunca se dan y los raterillos y drogos siguen haciendo de las suyas, es porque los afectados tienen flojera, no quieren perder el tiempo, no creen en la Policía y, sobre todo, “no quieren denunciar porque todos aquí nos conocemos, sucede que no queremos denunciar a los amigos o a los parientes”, explica Roberto Llamas, jefe delegacional de El Porvenir. Policías hay, faltan denuncias Las instalaciones y oficina de la delegación de El Porvenir, que por años han permanecido obsoletas, cuenta con cuatro patrullas tipo pick-up