A dos años de la administración de Enrique Peña Nieto, la paridad peso-dólar ya rebasó la barrera de los 15 pesos. Cuando el priista asumió, la cotización se situaba en 12.73 por dólar. Tan solo en lo que va de 2014 el peso ha perdido un 10 por ciento de su valor, frente a la divisa verde. Ante tal escenario ni el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, ni el Secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, han dado la cara. En cambio, el Presidente del Banco de México es quien ha informado de la complejidad con el tipo de cambio. La economía hundida (paupérrimo crecimiento del 1.1 por ciento en lo que va de 2014), una baja en el precio del petróleo (en noviembre y diciembre el costo por barril ha caído 40 por ciento), el desempleo (2.7 millones de personas sin trabajo), una inflación elevada (4 por ciento), el incremento en la deuda pública (45 por ciento), inseguridad, volatilidad constante en el tipo de cambio (14.80 pesos en ventanilla en la primera quincena de diciembre), han sido elementos que han generado una crítica debido a la política económica del Presidente Enrique Peña Nieto. Cabe destacar que respecto al último punto, el gobernador del Banco de México afirmó que gracias al anuncio de la venta de dólares por la Comisión de Cambios (200 millones en caso de que el peso se deprecie en un 1.5 por ciento), el mercado financiero marcha condicionalmente bien. “'Es oportuno que la autoridad intervenga y se ordene el mercado, si no esto podría llevar a una tendencia desestabilizadora que ciertamente no la deseamos”, comentó con cierta preocupación a un medio de circulación nacional. Ante tal escenario el economista Roberto Valero Berrospe dijo a ZETA que la palabra técnica para hablar de lo que está sucediendo con el dólar es devaluación.