Mientras senadores del Partido Acción Nacional llamaron a que se transparentara el proceso por el cual la empresa China Railway ganara la licitación de la construcción del Tren de Alta Velocidad que pasará por México, D.F. y Querétaro; el presidente Enrique Peña Nieto, canceló hace un momento el concurso. Los legisladores señalan que se le dotó de información clave, lo que obligó a otras 16 empresas a desistir del proceso, durante la reunión de trabajo de la Comisión de Comunicaciones y Transportes con el titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Gerardo Ruiz Esparza Javier Corral señaló que el gobierno dotó de dicha información a la empresa y los contendientes, con el conocimiento del hecho, prefirieron declinar; con ello, dijo, “se ha amañado un proyecto multimillonario con el fin de favorecer a los dueños de las empresas”. El senador chihuahuense cuestionó la prisa del gobierno de acelerar el proceso, cuando se tenía de plazo hasta marzo de 2015, la cual podría tener entre las razones un trasfondo electoral, así mismo, el senador hizo el señalamiento a Ruiz Esparza en torno al hecho de que el proyecto de la empresa China Railway resultará 27 por ciento más caro de lo presupuestado, con un monto total de 50 mil 820 millones de pesos. Expresó que no debe pensarse en las prisas y debe cumplirse con lo estipulado en la constitución; la suspicacia generada, añadió, ha sido por las prisas y no puede determinarse si la empresa fue la mejor cuando solo fue un concursante. “El 134 de la Constitución lo obliga [al Secretario de Comunicaciones] como parte del Estado a que en la contratación de las obras se aseguren las condiciones en cuanto a precio, calidad, financiamiento, oportunidad y demás circunstancias pertinentes”, detalló. Por su parte, Javier Lozano Alarcón, Presidente de la Comisión de Comunicaciones y Transportes, afirmó que Ruiz Esparza “no convenció a los senadores sobre el proyecto” y reveló que la empresa que ganó la licitación no fue aceptada para participar en un proyecto en Brasil porque tuvo un accidente que provocó la muerte de 40 personas. Indicó que un tren de esta naturaleza, en Europa tiene un costo de entre 25 y 39 millones de dólares, y en el caso mexicano se le están asignando 17 millones de dólares. Señalo que hay posibilidad de que el proyecto sea botado y tenga que ser rescatado por el gobienro, además “no hay tren de pasajeros en el mundo que sea rentable por sí solo si no tiene un subsidio”, enfatizó. En su participación, Marcela Torres Peimbert pidió reponer el proceso de licitación debido a los cuestionamientos de la sociedad en materia de transparencia y corrupción y en donde “misteriosamente gana una empresa china y dos empresas mexicanas que están asociadas al ex presidente Salinas de Gortari y al actual presidente Peña Nieto” y consideró que debió realizarse un estudio en el que se pudieran comparar las propuestas. Daniel Ávila Ruiz anunció que el Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional solicitará a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) una auditoría a todo el proceso de licitación y construcción del tren de alta velocidad México-Querétaro, ya los 50 mil millones de pesos que se piensa invertir son recursos de todos los mexicanos, por lo que debe garantizarse total transparencia, dijo. Igualmente Francisco Búrquez Valenzuela, Pilar Ortega Martínez y Víctor Hermosillo se manifestaron a favor de un transparentar los hechos.