“El peligro que tienen los demócratas es que si no quieren pasar la reforma migratoria pueden perder el apoyo de los latinos”, declaró Bill Richardson, ex gobernador de Nuevo México y ex embajador de las Naciones Unidas, durante la conferencia “El futuro de la migración” en este día actividades de Tijuana Innovadora. El gran problema que enfrenta el partido, señaló, son las deportaciones masivas y la Casa Blanca, “si no vas a pasar la reforma migratoria por lo menos tranquilízate con las deportaciones”. “¿Por qué quieres separar a las familias?”, cuestionó. Indicó que los Estados Unidos están pasando por un gobierno divido y si los republicanos toman el control del Senado esto continuará y muchos de los avances en cambio climático y migración estarían en peligro de no continuarse. Añadió que la población latina está creciendo, sobre todo la sudamericana, y en el caso de Arizona el 25% de la población es latina, pero muchos no votan, lo que sí está impactando en es el electorado conservador, “mientras más latinos se postulan para la oficina pública más asustan a ese estado”. Por otro lado, continuó, los estados que anteriormente fueron mexicanos son cada vez más demócratas. Plantó que Tea Party, la derecha ultraconservadora y antimigrante, ha encontrado la manera de controlar al Partido Republicano, pero a pesar de ello hay republicanos moderados. “La esperanza es que el Partido Republicano evolucione y se convierta en un partido moderado” y una elección como la del 2014 no hará ese cambio, pero si la presidencial. Para lograr la reforma migratoria se requiere del esfuerzo de ambos partidos, lo que tiene que hacerse es trabajar con quien quiera que esté en el poder, y puso de ejemplo al Pacto Por México al que calificó como “un toque maestro”. Añadió que el legado principal del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, va ser aprobar una reforma migratoria con dos exponentes: el primero, tener seguridad en las fronteras y dar oportunidad a los millones de mexicanos de salir de las sombras. Richardson comentó que fue el primer gobernador en permitir que un dreamer accediera a la educación universitaria, y calificó como importante el integrar a los latinos en la sociedad americana, “pero no otorgarles necesariamente ciudadanía”, y que encuentren su manera de mantener sus raíces mexicanas. Se dijo decepcionado del discurso estadounidense que ve a los inmigrantes con miedo, como lo veían a él cuando argumentaba el Tratado de Libre Comercio. Señaló que la reforma migratoria va a ser aprobada por motivos políticos, y que si se sigue impulsando el rechazo a la migración y la negación a la reforma beneficiarán a los demócratas en la futura elección de 2016. En la próxima elección presidencial los republicanos verán la necesidad de trabajar junto con los demócratas, para aprobar la reforma migratoria, la cual afectará directamente a la frontera, agregó. México es un país con el que se ha colaborado en temas como las garitas y puentes aéreos, pero también es un país que tiene potencial para el desarrollo de energías renovables, con infraestructura requerida y bastante investigación en el tema. Se refirió a una reunión que tuvo con el gobernador Francisco Vega de Lamadrid en la que se planteó la construcción de una planta solar en Mexicali. Si México desarrolla su propia red y su propia energía, bajarán los precios y se crearán empleos en la frontera que permita que las personas que no emigren, no necesariamente que no crucen, además que se generará competencia en el tema de energía con California.