El hombre muerto en las inmediaciones del fraccionamiento de Infonavit de la Zona del Río en Tijuana al mediodía del 24 de octubre, se llamaba Mario Alberto Santillán y había sido detenido por la policía municipal el 15 de septiembre de 2014 por el delito de robo con violencia y en posesión de 18 dosis de droga, según datos de la corporación. “Acababa de salir”, comentó un uniformado. El cuerpo quedó tendido en la banqueta donde los peritos tomaron fotos de los vestigios de sangre que muestran que la víctima se arrastró herida antes de fallecer. Testigos de los hechos informaron que Santillán forcejeó con alguien que estaba a bordo de un taxi libre (blanco con franjas naranjas) número 414. En este momento las autoridades buscan al chofer que se dio a la fuga. La hipótesis inicial es que pudo tratarse de un asalto, el cuerpo de Santillán fue encontrado con la pistola en el pantalón con la mano dentro, y a la misma altura – el abdomen- están los balazos que le quitaron la vida. “Parece que al intentar sacar el arma se disparó”, comentó un policía en el lugar, “pero estamos buscando al taxista para que aporte más datos”. La policía ministerial no descarta la posibilidad de que él o los hombres que iban en el taxi hayan agredido al ladrón fallecido.
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