En días pasados se dio el banderazo de arranque de la segunda etapa de verificación y vigilancia de productos en la entidad por parte de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO). De inicio, fueron sancionadas cuatro gasolineras de Los Cabos por abusos al consumidor, ya que no están vendiendo litros de a litro. Dos han sido clausuradas de manera definitiva, por “encontrar que estaban expidiendo gasolina por debajo de los litros que deben contener 100 mililitros y que fueron suspendidas; una más sancionada por negarse a permitir la verificación, impedir la verificación y el acceso de los verificadores; y una cuarta más que curiosamente estaba cerrada”, informó Lorena Martínez Rodríguez, delegada de PROFECO. En Baja California Sur han sido muy comunes las denuncias respecto a abusos de parte de gasolineros, por ello, la verificación se hizo con el afán de regularizar al sector. Los dueños de las estaciones de servicio podrían ir la cárcel, pero se deben seguir ciertos protocolos, “primero suspender el servicio como una medida de protección al consumidor; segundo, imponer una sanción económica; y tercero, si es una empresa reincidente que haya cometido esta falta más de una vez, se da vista a Petróleos Mexicanos para que eventualmente pueda retirar la concesión, y cabe la posibilidad, en caso de ser es una empresa altamente reincidente, de proceder a la denuncia penal”, expuso la funcionaria federal. Agregó que es importante que la ciudadanía ponga su queja en caso de que alguna estación de servicio de combustible no le sirvió litros completos, solo así se podrá sancionar a los responsables y, de ser necesario, pasar varios años tras las rejas. Actualmente hay 50 verificadores de la dependencia actuando en el estado. En una primera etapa, el operativo se concentró en la verificación y vigilancia de artículos de primera necesidad, como son tortilla, huevo, leche y agua. Mientras que en esta segunda fase, se vigilarán principalmente tres áreas importantes: materiales para la construcción en cuanto a distribución y costos; electrodomésticos de mayor demanda, derivado a la pérdida de estos equipos durante el paso del huracán “Odile”; y la escasez de éstos por los actos de rapiña. Además, se revisará la actividad de las casas de empeño, ya que los productos que fueron extraídos de las tiendas departamentales pudieran ser llevados a empeñar. Para concluir, Isaías González Nava, delegado PROFECO en Baja California Sur, dijo que la dependencia es “de puertas abiertas” y apoya a la sociedad “conteniendo precios, aplicando la norma”.
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