Los robos con violencia en Playas de Rosarito han dejado cuatro muertos de enero a julio de 2014, de acuerdo a información de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). El más reciente de estos homicidios fue cometido la tarde del sábado 26 de julio por un grupo de sujetos que se introdujo a una casa en obra negra en la colonia El Campito del Ejido Primo Tapia. Ahí vivía Juan Veloz, de 30 años de edad. Recibió un impacto de bala 9 milímetros que le atravesó el costado izquierdo hasta salir por su espalda. Mientras sangraba atado a una silla, los dos sujetos tomaron su televisión de plasma y otros objetos personales para introducirlos al carro Honda negro, propiedad de la víctima y salir huyendo. Hasta hoy continúan prófugos. Aunque un menor de edad, quien escuchó los gritos de ayuda del hombre, entró hasta la vivienda para ayudarlo, murió antes de la llegada de paramédicos de la Cruz Roja y de la policía municipal. Después arribaron los agentes ministeriales, a las 3:30 de la tarde, para levantar las pruebas correspondientes. De los elementos recabados, se presume que el móvil fue un robo, explica el subprocurador de Rosarito, Antonio Chávez Hoyos. Más denuncias, menos consignaciones Del 1 de enero al 28 de julio de 2014, la PGJE ha levantado mil 80 actas de averiguación previa por robos en sus distintas modalidades. De éstos se han realizado apenas 120 consignaciones al Juzgado, las demás actas continúan en integración. Es decir, el 1 por ciento de los rosaritenses ha acudido a denunciar un robo, de acuerdo a la población estimada en 100 mil 817 personas por el Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado (COPLADE) en 2013. Al comparar la cifra con los primeros siete meses de 2013, se registra un incremento del 9 por ciento en cuanto a las denuncias levantadas, pero una reducción del 38 por ciento en cuanto a las consignaciones, ya que en ese entonces se iniciaron 984 actas y se consignaron 194 personas. Esta situación la explica el subprocurador Antonio Chávez Hoyos como resultado del criterio más estricto que los jueces han adoptado para consignar a acusados de robos, solamente si se les encuentra en flagrancia. “Muchas veces, hemos consignado casos de detenidos al juez y los han dejado en libertad porque el criterio del juez penal es que no hubo flagrancia ni fue inmediata la detención”, detalla. Pese a que las víctimas han señalado a los delincuentes y la policía logra localizarlos en menos de 20 minutos, los jueces ordenan su liberación. Es entonces que el juez devuelve el expediente de la averiguación previa al ministerio público para que éste lo reenvíe al juez, pero con más pruebas contra el acusado para solicitar una orden de aprehensión. Sin embargo detener nuevamente al acusado, resulta complicado para los agentes ministeriales. “Resulta muy difícil, en la mayoría de los casos, volverlo a localizar, tanto en homicidios, violaciones y robos, porque se van de la ciudad después de los hechos”, asegura. El subprocurador reflexiona sobre esta situación que ha provocado conflicto en la labor de la PGJE. “En Rosarito, desde enero de este año, hemos encontrado que el criterio del juez es muy estricto en cuanto a las detenciones”. Para evitar la liberación de delincuentes, tanto la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) como agentes de la PGJE han sostenido reuniones con los jueces calificadores y mandos policiacos “para compartir puntos de vista que eviten situaciones de técnica que orillan que se deje en libertad a la persona”, expone el subprocurador. Suben robos a casa habitación y de vehículos Desde el 14 de julio de 2014, que Joaquín Olea López asumió el cargo de director de la policía municipal de Rosarito, el funcionario reconoció el incremento en robos domiciliarios y de vehículo. Específicamente en las colonias Constitución y Lucio Blanco, donde los índices son más altos en el robo a casa habitación. Eduardo Castro Jiménez, consejero presidente del Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Playas de Rosarito, coincide con el funcionario, pero también señala otras áreas que requieren mayor vigilancia. “La colonia Constitución va a ser la primera en índice de robos porque es la más grande, pero al estar en el Centro de la ciudad tienen vigilancia de la policía. En otras colonias como Ramos e Infonavit Misión del Mar II, hemos pedido al director que envíe patrullas”, refirió. De enero al 28 de julio de 2014, la PGJE ha recibido 379 denuncias de robo a casa habitación, 289 denuncias de robo de vehículo, 173 denuncias de robo simple y 136 denuncias de robo con violencia en Playas de Rosarito. Esta cifra cobra nuevas dimensiones, al considerar que solo uno de cada tres delitos resulta en una denuncia formal ante el ministerio público, explica Jonathan Díaz, presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública del Estado. En recorridos en colonias de la ciudad, Eduardo Castro, presidente del Comité Ciudadano de Seguridad Pública, ha recogido las impresiones de los vecinos. “La amas de casa identifican a sus propios asaltantes, a quienes roban de sus patios o entran a sus viviendas para hurtar. En cada calle que visito, los identifican como adictos a las drogas”, señala. Trueque de objetos robados por droga La única banda de robo desarticulada este año, ha sido una dedicada al robo de vehículos y su posterior desmantelamiento para obtener autopartes que vender, en la colonia Colonias del Sol. En este operativo de la PGJE, fueron detenidas un grupo de personas en un domicilio donde se encontraban 15 vehículos con reporte de robo en proceso de quedar desmantelados. Fuera de este caso, la PGJE no ha detectado otra banda dedicada al robo. Y es que tanto autoridades municipales como estatales, relacionan el incremento de los robos a casa habitación al problema del narcomenudeo y de la drogadicción. “Muchas personas que empiezan a cometer esos robos para comprar droga”, comenta el director de seguridad pública de Rosarito. El presidente del Comité Ciudadano de Seguridad Pública, opina lo mismo “debido a la drogadicción, los indigentes entran a robar a los carros y a las casas para comprar dosis de droga”. Un envoltorio pequeño de cristal es vendido en las calles de Rosarito por 40 pesos o su equivalente en mercancía. Policías municipales reportan el incremento del trueque de objetos a cambio de pequeñas dosis de enervantes. “Las casas ubicadas alrededor de las tiendas de droga o picaderos reportan más robos que el resto de las viviendas en esa colonia”, explica uno de los agentes. Y es que muchos adictos acuden hasta el sitio de distribución sin dinero para adquirir la dosis, por lo que optan por robar objetos conforme se acercan. “Dependiendo de qué tan desesperado esté, una persona puede intercambiar hasta un celular robado por dos dosis de cristal”, confirma un oficial. Recientemente, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Rosarito, Rafael Crosthwaite señaló que el área turística de la ciudad se ha visto invadida por indigentes de origen estadounidense que deambulan en la calle para pedir dinero. Hasta la subprocuraduría han llegado reportes de riñas entre quienes son señalados como adictos y turistas que se niegan a entregarles dinero a forma de limosna. Aunque ninguna denuncia ha sido presentada formalmente, la PGJE tiene conocimiento del tema. El subprocurador explica que muchos turistas consideran tedioso el proceso de levantamiento de denuncia, por lo que no llega el registro forma a la autoridad correspondiente. Por ejemplo, en caso de un robo de cartera, la víctima prefiere llamar a su banco para cancelar tarjetas de crédito y débito, así como acudir a la reposición de identificaciones que levantar la denuncia. Policías adscritos a la policía turística, atendieron la tarde del sábado 26 de julio, el reporte de robo de una bolsa a una mujer que se encontraba en la playa. Al salir del baño y regresar a su sitio en la arena, notó que faltaba su bolsa. El robo simple fue reportado a los agentes en cuatrimotos, quienes atendieron el reporte. Mientras se movilizaban para la búsqueda del individuo, que de acuerdo a testigos vestía una gorra negra y pantalones de mezclilla, la mujer fue notificada vía celular que su tarjeta de débito había sido utilizada en una tienda del corredor Pacífico en Tijuana. La víctima prefirió no levantar la denuncia ante la PGJE y optó por cancelar su tarjeta. Municipales de Reacción Inmediata El fin de semana del viernes 25 y sábado 26 de julio, Playas de Rosarito registró una ocupación de mil 600 cuartos de hotel y una afluencia turística calificada por la Secretaría de Turismo del Estado como histórica desde 2003. Conciertos de música de banda, aniversarios de clubes nocturnos, festivales gastronómicos y playas atiborradas de personas, contribuyeron al número de visitantes que la ciudad recibió ese fin de semana. El saldo, de acuerdo a la PGJE, fue de tres reportes de robo de vehículo, un robo de teléfono celular a un turista y una riña entre jóvenes en una de las calles de la colonia Barbachán, donde se concentran los lugares turísticos a orilla del mar. La noche del sábado 26 de julio, ZETA acompañó al grupo de Reacción Inmediata de la policía municipal de Rosarito en su recorrido por las distintas colonias. El equipo especializado, se concentra en atender delitos de alto impacto como homicidios, secuestros, robos, violaciones y sirve como apoyo al resto de las unidades. Los agentes patrullan colonias, zonas turísticas e incluso el área de Popotla, considerada zona de conflicto por ser categorizada como “federal”, pero sin presencia permanente de ninguna corporación policial. “En la colonias, los globos (de droga) son pequeños, pero en Popotla son del tamaño de una mazorca”, comenta uno de los oficiales, mientras el grupo realiza un recorrido en la zona que de día funciona como turística, pero de noche, droga es desembarcada y distribuida. La proliferación de sitios de venta de droga en Popotla, también ha disparado los robos, por lo que el grupo patrulla la zona en búsqueda de droga que decomisar. En mayo, detuvieron a personas que traían consigo tres armas y 200 globos de cristal. “Parte de nuestros esfuerzos es sacar la droga de las calles porque sabemos que representan pérdidas a los narcomenudistas y porque así también, bajan los robos en los alrededores”, comenta uno de los agentes. Los policías reconocen la nueva modalidad de trueque adoptada por los vendedores de droga, quienes aceptan objetos robados a cambio de droga. “En escondites cercanos a las tienditas (de droga), hemos encontrado muchos teléfonos que confesaron haber robado para intercambiarlos por dosis”. Sin embargo, los narcomenudistas también han adoptado nuevos mecanismos, como la venta de droga a domicilio. A través de llamadas, los interesados solicitan sus dosis, que son entregadas hasta su vivienda para evitar que sean arrestados al entrar o salir de esos sitios. Los distribuidores, a su vez, utilizan vehículos para repartir las dosis y esconderlas mejore, en caso de ser detenidos. En este mes, fueron encontradas diversas dosis con un imán adherido para esconderlas detrás del estéreo del carro. El sujeto se dirigía a una vivienda para hacer una de estas entregas. Aunque Daniel de la Rosa, secretario de Seguridad Pública del Estado, explicó que desde el 3 de junio, la Policía Estatal Preventiva (PEP) ha mantenido un operativo permanente en ese municipio, con lo que se ha disminuido en un 7 por ciento, la incidencia delictiva incluyendo robo con violencia y robo a casa habitación, estos dos delitos continúan a la alza. Modalidad Número de denuncias (1 de enero a 28 de julio de 2014) Número de denuncias (1 de enero a 28 de julio de 2013) Incremento Robo a Casa Habitación 379 346 9% Robo de Vehículo 289 267 8% Robo con Violencia 136 135 0% Robo Simple 173 114 34% Robo a Comercio 63 85 -26% Robo Calificado de Dependiente (empleado) 3 11 -73% Tentativa de Robo 13 12 0%
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