Durante el fin de semana, tres recién nacidos en Tecate, fueron retirados de sus madres por el DIF estatal, luego de que los exámenes antidoping de las mujeres resultaran positivos en consumo de metanfetaminas, explicó el director del Hospital General de Tecate, Pedro Ruiz. Uno de estos pequeños nació con el síndrome de abstinencia, por lo que sigue hospitalizado desde el jueves 14 de agosto de 2014, día en que su madre dio a luz. La joven, de 19 años, resultó positiva en el consumo de metanfetaminas y cristal, por lo que el bebé se encuentra delicado de salud. En algunos casos, los bebés que nacen de madres que consumieron narcóticos durante el embarazo, también son dependientes de la droga y ya que no están recibiendo la dosis que consumieron durante su gestación, pueden presentar síntomas de abstinencia que ponen en riesgo su salud. Los síntomas incluyen desde diarrea, llanto excesivo, irritabilidad, fiebre, problemas para dormir y respiratorios, vómito, hasta convulsiones. En el caso del recién nacido en Tecate, se encuentra bajo tratamiento médico que ha incluido exámenes de sangre y orina, ayuno, medicamentos y cuidados especializados. Mientras que los otros dos bebés, ambos nacidos el viernes 15 de agosto de madres de 29 años de edad, ya fueron dados de alta por el hospital. Sin embargo, hasta la tarde de este martes 19 de octubre, los niños no habían sido recogidos por personal del DIF estatal, quienes se encargaran de su cuidado hasta que se dictamine si podrán ser dados en custodia a las madres o a algún familiar. Ruiz explicó que por disposición de las autoridades de salud del Estado, toda mujer que sea ingresada para dar luz, debe ser sometida a un examen antidoping y de resultar positivo el consumo de drogas como la metanfetamina, marihuana o cocaína, se debe informar a la Procuraduría para la Defensa del Menor y la Familia de DIF Baja California para que ellos determinen la situación de los menores. La intención, de acuerdo al director del Hospital, es evitar que los niños sean objetos de omisión de cuidados, maltrato, desnutrición y otros problemas de salud, ya que éstas son situaciones recurrentes de padres toxicómanos que acuden para que sus hijos sean atendidos. Además, el médico explicó que en reuniones con la Secretaría General de Gobierno, la Procuraduría para la Defensa del Menor y la Familia de DIF Baja California y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, se ha acordado que el Hospital General comparta la información de madres toxicómanas para que el DIF intervenga en los casos que considere adecuados. Por su parte, Consuelo Luna, procuradora del Menor y la Familia, indicó “es un procedimiento que tienen establecido en todo el Estado, los hospitales generales o centros de salud que atienden a mujeres que si en el momento del parto dan positivo en el consumo de droga, los menores son puestos a disposición de DIF para su resguardo y el trabajo con la madre para lograr su rehabilitación”.