El diputado federal por Baja California y aún por el PT, aunque ya pertenece a MORENA, Jaime Bonilla, no acepta ningún bono adicional en la Cámara de Diputados. Ahora tan de moda pagarle de manera extraordinaria a los legisladores por el trabajo que hicieron para sacar las reformas propuestas por el Presidente Enrique Peña Nieto, tanto Bonilla como el líder de la bancada de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal, no quieren el bono, y de hecho lo regresan. Esta semana, Monreal, cercanísimo a Andrés Manuel López Obrador, regresó 15 millones de pesos que le habían dado para la fracción de Movimiento Ciudadano. En el caso de Bonilla, representante del Partido del Trabajo, su dirigente no le ha dicho cuánto le tocó a la bancada ni cuánto a él, pero si le llega, asegura: lo regresará. Lo mismo dice que hará con el bono de fin de Legislatura, que calcula en 2 millones de pesos por cada uno de los 500 diputados federales. Bonilla explica que con lo que le pagan y lo que le dan para asesores, oficinas y como presidente de la Comisión para de Asuntos de la Frontera Norte, es más que suficiente. Por cierto, en septiembre próximo presidirá en Hermosillo, Sonora, una junta con integrantes de la Comisión para el análisis de su propuesta de Ley para la Frontera.
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