El lunes 23 de junio estalló el conflicto en la Escuela Primaria “18 de Marzo”, ubicada en el corazón del centro de la ciudad de La Paz. Nueve de los doce profesores y un conserje, tomaron las instalaciones del plantel para colocar cadenas y candado a las entradas de la escuela. Los maestros se manifestaron de esta manera para denunciar malos tratos por parte de Blanca Esthela Ruiz Pérez, directora de esa institución educativa. “Hubo un cierre de la escuela de parte de nueve maestros y una conserje, la señora Lupita, con cadenas y candados, cerraron las dos entradas de la escuela. Ellos argumentan que de mi parte hay acoso laboral, ausentismo, prepotencia e intransigencia”, expresó la acusada. En defensa a la problemática que la envuelve, Ruiz asegura que hasta el momento no se ha podido comprobar el supuesto abuso en contra del personal docente, “se están haciendo las investigaciones de cada uno de ellos, hasta el momento estamos esperando a que lo hagan verdad, a que digan cómo, cuándo y dónde fue”. La señalada reconoció que si toma fotos, “no es acoso laboral, es por evidencia, para sostener lo que digo; tengo fotos del profesor Aldo por el cerco de allá platicando con ‘Tony’, el conserje, en hora de clases, y muchas más fotos. Tengo del profesor de Educación Física, que enamora a las madres de familia”, sostuvo. Molestos por esta situación, padres y madres de familia argumentaron que los maestros manifestantes y el personal de apoyo, faltó al pacto que se había hecho en reuniones anteriores para no suspender las clases y, pese a que no habría suspensión, las instalaciones fueron tomadas. “Realmente me pareció que los maestros no tienen palabra, porque ya habíamos hablado, a pesar de que ellos habían dicho que iban a llegar hasta últimas consecuencias, pero cuando tuvimos una reunión con ellos, algunos padres de familia le hicimos ver que lo que más importaba era que los niños tuvieran clase. Hubo un padre de familia que pidió le firmaran, comprometiéndose a que no iba a haber problemas de paro. Dijo que no era necesario, que daba la palabra de que no iban suspender clases”, expresó Yolanda Geraldo Sánchez, madre de familia. El conflicto no solo es cuestión de problemas al interior: “Me he dado cuenta que hay mucha flojera en esta escuela, y mucha apatía de las autoridades, incluso ya no hay una relación como antes de padres a maestros, sí platican con uno, pero no en un acorde para mejora, porque no admiten ninguna sugerencia, se sienten como agredidos”, señaló la señora Geraldo. La Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de Raymundo Tarín Ruiz, director de Educación Primaria, afirmó que la dependencia ya tenía conocimiento de la situación en la Primaria “18 de Marzo”, pero superó los extremos, ya que por tratarse de una afectación al calendario escolar y la toma de las instalaciones, pasa directo a la contraloría de la dependencia. “Es un caso que de alguna manera ya teníamos conocimiento, en lo que respecta a nivel primarias, es mas de concientización, ir viendo los problemas que se generen en una sustitución, y pues se resuelvan por consenso, que no se llegue a los extremos. Cuando ya se llega a los extremos, se pasa el caso a contraloría”, reiteró Tarín.