En una tierra tan fértil no es justa la pobreza extrema

En la indígena cultura Europa sembró su saber, compartió de su doctrina y la técnica para crecer, sembrando en la mente humana la religión y la cultura, como base bien fincada para una sociedad segura. Aún en tiempos de Conquista era menos cruel que ahora, la sociedad explotaba al obrero igual que ahora, pero le ofrecían trabajo, hoy no le ofrecen apoyo porque nadie crea un empleo para bien del campesino. Las tierras están ociosas y el labrador no está en casa, se fue a conseguir afuera el pan para sus familias. Si como antes trabajaran las tierras que hoy están solas, buen fruto cosecharían imitando a las haciendas. Ya tenemos el cimiento para reconstruir el templo en donde viva la Iglesia compartiendo su riqueza.   Vicente Martínez Méndez Tijuana, B. C.