Todos los demás valores convergen en uno solo, solo que hablamos de amores, amores, pero sin dolo. El amor se manifiesta de formas muy singulares, en medio de una gran fiesta o se hablan por celulares. El amor nos hace reír, el amor nos hace llorar, con amor puedes ser feliz y lo aprendes a valorar. El amor tiene tal valor y tanta fuerza en nosotros, buscando evitar el dolor cuando se nublan los ojos. El amor es don de vida, el amor es pan del alma, condimento de cada día, regocijo y también calma. Los niños lo necesitan, el anciano lo venera, la pareja con la cita, la felicidad genera. Lo material no define, el dinero no lo compra, al amor hay quien lo mime ¡y que nadie le haga sombra! El amor nos da alegrías, también concede la suerte, del dolor, las alegrías y por ti, amor, soy más fuerte. El amor es tolerancia, el amor es compromiso, él no entiende de distancias, pero aprendo a ser sumiso. El amor es sacrificio y sabe del sufrimiento, por amor se deja el vicio, si hablo del amor, no miento. En la sonrisa de un niño, en el llanto de un anciano, el amor se vive en chino, español o el italiano. Debemos tomar partido de lo que el amor genera porque experiencia has tenido y que el amor no se muera. Con amor puedes perdonar, sin amor es un engaño, de tu tiempo podrás donar y no causarás más daño. El amor toma la forma del ángel de tus amores, del amor será la norma para corregir errores. Espero que en esta vida lo encuentres en tu camino, que no pienses en la huida, menos en los desatinos. Porque no somos perfectos ni, tampoco, indispensables, no le busquen los defectos, el amor no tiene, ¿sabes? El amor es tan bonito que no comprende desaires, al amor ponle un moñito y guárdalo en tus cantares. En el amor no hay cadenas, no hay lugar para las dudas, sin el amor te condenas a vivir en la amargura. Joel Vizcaíno Parra Tijuana, B. C.
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