Llega Pepito a casa todo arañado y con un ojo morado, en eso su madre le dice: — Pero Pepito, ¿no te he dicho que cuando tuvieras ganas de pelearte, contaras hasta veinte? “Sí mamá, ya lo sé, ¡pero es que la madre de Jaimito le dijo que contara hasta diez!”. Autor: La mamá de Jaimito.