Hace un par de décadas, impartiendo la materia de historia de trabajo social, incidí con una alumna brillante. Acaparó mi atención al inicio del curso al hablar sobre el tema de recursos humanos que posee una familia. Ella se manifestó, se distinguió y fue inagotable su contribución a la clase con valiosa información y vivencias sobre el tema. Cada vez constataba durante el curso su gran calidad humana y su espíritu de lideresa. En la actualidad trabajamos para la misma institución, “Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas”. Efectivamente he reafirmado lo muy en alto que tiene el valor de la familia porque l vive con amor y entrega y como líder he percibido su evolución. Ahora nos representa en la Secretaría General de nuestra delegación sindical, D-II-32, aquí en la Preparatoria. Como tu ex maestra te digo, distinguida Profesora Emilia Castillo Luque, alumnas como tú quedan grabadas en las mentes y en el corazón de sus maestros por siempre, ahora te digo: ¡Feliz día del maestro! Te felicito enormemente por tus logros, te admiro, aprecio y deseo continúes con tu trayectoria de merecidos éxitos. Fraternalmente, tu ex maestra. Eva Pérez Maravilla