En la humanidad presente hay rumores diariamente, se escuchan de todo tipo, pero cambian el concepto. Mienten en pocas palabras para agrandar las discordias, hay quienes con eso gozan porque su poder aumentan, sobre todo cuando buscan debilitar causas justas. El humano es por ventura parte de una casta pura, frágil, por desobediencia, con facilidad se contamina, unas veces por envidia y otras por conveniencia. Cuando del rumor se vive la pasa mal quien lo quiere, por no saber de su historia, tampoco tiene memoria. No hay que confiar en rumores en cuestiones de valores; es bueno verlo de cerca y examinar la materia, ordenar según la historia, la cultura y sus costumbres. Solo así será este mundo para todos, un refugio, mientras cada quien aprende a educarse como debe. Vicente Martínez Méndez Tijuana, B. C.
Los rumores son terribles predadores
Autor(a)
- Publicidad -