Mario Iván Martínez convocó a más de 900 bajacalifornianos en la primera de dos noches en que se presentará el monólogo en la Sala de Espectáculos del Centro Cultural Tijuana, adaptado del cuento “Diario de un loco”, escrito por el ruso Nikolai Gogol. Atentos los fronterizos, carcajean con el humor que imprime el actor mexicano, quien dijo a ZETA que uno de sus propósitos de vida es impulsar la lectura: “He tratado de contribuir en la lectura, al sembrar una semillita en los niños que quieren leer ‘El Quijote’, por ejemplo. Somos un país que ya no lee porque desafortunadamente a nuestros gobiernos no les ha interesado fomentar, cultivar una población erudita, porque una población culta es consciente de los rezagos e injusticias, se vuelve por ende, una población contestaría e insurgente, y eso no le conviene a los gobiernos; desde la Colonia hasta hoy, a los gobiernos les ha favorecido tener una población con bajo nivel cultura, una población así, es más manipulable. Y por ello seguimos penando. Ahora, es muy importante que los padres adquieran esa consciencia y se den cuenta que no pueden dejarlo todo a los mentores, y que la lectura sea gozosa”, subrayó. Según afirmó Mario Iván, quien el día miércoles ofreció la puesta en escena de “El Quijote”, contribuye constantemente a encausar a los niños a la aventura de los libros y la buena música. Interpretando a un loco, Martínez se hace valer de una escenografía, iluminación y arreglos musicales para interpretar la adaptación del cuento de Gogol, trabajo que se suma a la colección de poemas infantiles que actualmente prepara para publicar musicalizados. Llevarán versión de Diario de un loco a Inglaterra Extraído de un quinteto de cuentos, “Diario de un loco”, fue adaptado por Luly Rede, prima del actor Mario Iván Martínez, quien compartió a ZETA que los personajes que interpreta deben ser trascendentales, por ello su ausencia de la televisión mexicana, contrario a los teatros. “Ha habido ofrecimiento, pero no me han convencido del todo. Para que yo me embarque en un proyecto televisivo, el personaje debe ser trascendental, tiene que tener vida propia, y muy a menudo te ofrecen personajes que son interlocutores con los protagonistas, yo prefiero hacer 15 capítulos de un doctor loco polaco, al amigo del protagónico en 284 mil capítulos oyendo sus problemas, sin vida propia. Casi siempre me espero a que venga algo bien, no importa que sean 4 ó 5 años, mientras el personaje tenga trascendencia”, refirió Martínez, quien en el monólogo que ofrece el último jueves y viernes de mayo, comparte la actuación con la escenografía, iluminación y música. A la par de “Diario de un loco”, el protagonista de la cinta mexicana “Como agua para chocolate” ofrece constantemente espectáculos infantiles basados en las canciones de Cri Cri, Cuentos Mexicanos, “Zapatero y los Duendes”, “El niño de mazapán”, entre otros que conforman el repertorio de 15 obras tituladas “Un rato para imaginar”, además de la publicación de 20 audio libros. Adherido a su personaje, permite observar en el monólogo la evolución hacia la esquizofrenia, que cuenta “Diario de un loco”, para la que Mario Iván Martínez tuvo que ponerse en contacto con pacientes esquizoides para poder interpretar a cabalidad la historia, misma que en breve llevará a Lima, Perú, seguida por la versión en inglés que pretenden mostrar en festivales de teatro en el Reino Unido.
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