La Secretaría de Salud no tiene un censo real de sexoservidoras que laboran en la Ciudad de La Paz, según reconocieron los propios funcionarios estatales, quienes consideran que es vital para determinar el riesgo de enfermedades de transmisión sexual, como el Virus de Inmunodeficiencia Humana VIH SIDA, y así llevar un plan de acción para prevenir a la ciudadanía. Hernán Vega Callejas, jefe de la Jurisdicción Sanitaria 03 de La Paz, reveló que el censo de 2014 no ha sido actualizado por el ayuntamiento paceño, al que corresponde reportar la actividad en bares, cantinas y centros nocturnos. “Ahorita no contamos con ese censo, es algo que nosotros estamos solicitando, esto con el fin, repito, como es el caso de las demás enfermedades, para nosotros darle seguimiento epidemiológico, que es lo que nos compete a nosotros” refirió. Actualmente hay 60 personas registradas que acuden semana a semana a valoración médica, gracias a ello se ha determinado que la sífilis y la gonorrea, son enfermedades de transmisión sexual más comunes. Las sexoservidoras que acuden a su chequeo con normalidad, son las establecidas en las zonas de tolerancia, mientras que las personas que trabajan en “giros negros”, se desconoce su estado de salud, así como el número de individuos en el ramo. Vega Callejas manifestó que para ejercer la actividad -aunque sea ilícita- se entrega un tarjetón a las sexoservidoras cuando éstas se encuentran sanas, y de detectar alguna anomalía, el tarjetón es retirado. Por su parte, Virgilio Jiménez Patiño, secretario de Salud de la entidad, reiteró que la responsabilidad es del ayuntamiento, por ser el responsable de estos giros y de la vigilancia del área pública: “Por medio de la Policía y Tránsito Municipal, (personal del ayuntamiento) recorre las calles, yo no puedo sacar a mi personal de Salud para ir a vigilar esos lugares, mi obligación como SSA, es atender la demanda de servicios de salud que lleguen a los centros de Salud o a las unidades de Salud. Ellos tienen también de alguna manera el control de los permisos de este tipo de antros de giros”, además de la elaboración de un padrón de sexoservidores situados en la vía pública del área céntrica de la capital. Por su parte, Guillermo Beltrán Rochín, secretario general del Municipio, refirió que por tratarse de una actividad fuera de la Ley, el ayuntamiento no tiene la obligación de generar y proporcionar dicho censo. “No tenemos nosotros un departamento o una dirección que se encargue de un control de las personas que llevan a cabo esta actividad de prostitución, donde debe existir un censo forzosamente por el tema de salud, indiscutiblemente es el Sector Salud, es la SSA la que debe tener un censo del registro y de la constante verificación que se dedica a esta actividad; nosotros al ser esta actividad ilícita lógicamente, no vamos a tener un control de esto”, aseveró. En cuanto a esta actividad, reconocida como “ilícita”, puntualizó que es la Dirección de Seguridad Publica, Policía Preventiva y Tránsito Municipal la encargada de hacer valer “el orden y no se atenten los reglamentos y los bandos de Policía, y si alguien está haciendo estos actos dentro de las vialidades o calles de nuestra ciudad, Seguridad Pública es la que tendrá que tomar medidas al respecto”. Según la administración municipal, han intentado acercarse a los negocios de giros negros establecidos en área céntrica para reubicarlos en una zona menos poblada, se hablaba de la zona cercana a la carretera a San Juan de Los Planes, pero al ser propiedades “privadas” -donde se localizan los giros negros-, no se les puede exigir el cambio de instalaciones.
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