Entre aplausos y homenajes, Elena Poniatowska recibió el Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes”, en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, por cierto, territorio natal del autor de “El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”, nacido justamente el 23 de abril de 1547. En el Día Internacional del Libro, eran las 11:45 am en Alcalá, España, cuando Poniatowska recogía el máximo galardón de la literatura en castellano, conocido también como el “Nobel español”, mientras en México eran apenas las 4:45 de la mañana. Portando un vestido tradicional oaxaqueño de color rojo con amarillo, Elena recibió con una sonrisa insoslayable el Premio Cervantes de manos del Rey Juan Carlos de España. La autora de “La Noche de Tlatelolco” se convirtió en la cuarta mujer hispanoparlante y la primera mexicana en recibir el Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes”. Semejante galardón había sido obtenido solo por las españolas María Zambrano (1988) y Ana María Matute (2010); y la cubana Dulce María Loynaz (1992); de hecho, los únicos mexicanos en recibir el Premio Cervantes han sido Octavio Paz (1981), Carlos Fuentes (1987), Sergio Pitol (2005) y José Emilio Pacheco (2009), a quienes se une Poniatowska este año. Durante su discurso de aceptación del Premio Cervantes 2014, Elena Poniatowska llevó su voz a la máxima tribuna de la literatura en español para expresarse contra la violencia imperante en el sexenio de Enrique Peña Nieto: “Todavía hoy se mercan las tripas femeninas. El pasado 13 de abril, dos mujeres fueron asesinadas de varios tiros en la cabeza en Ciudad Juárez, una de 15 años y otra de 20, embarazada. El cuerpo de la primera fue encontrado en un basurero”, lamentó la periodista. “Niños, mujeres, ancianos, presos, dolientes y estudiantes caminan al lado de esta reportera que busca, como lo pedía María Zambrano, ‘ir más allá de la propia vida, estar en las otras vidas’”, advirtió la narradora que en mayo 19 cumplirá 82 años. “El silencio de los pobres es un silencio de siglos de olvido y marginación”, lapidó. Finalmente, el ministro de Educación, Cultura y Deporte de España, José Ignacio Wert, ungió a Poniatowska como “Reina de las Letras Españolas”.