Lo que realmente quiere el diputado federal Juan Manuel Gastélum, es ser notario. Quienes saben de su preparación y esfuerzos, conocen los trece años que lleva con patente de aspirante. Eso de ser presidente municipal de Tijuana para 2016, no lo mata de ansia, pues ya fue alcalde cuando el ahora gobernador dejó esa posición en 2001 para contender por la candidatura que le ganó Eugenio Elorduy Walther en la interna panista. Y aquello de venirse en calidad de secretario de Gobierno, ahora que el doctor Guillermo Trejo Dozal cayó por el peso de una orden de aprehensión, pues tampoco es lo suyo. Primero porque, ante la necedad del mandatario Francisco Vega de Lamadrid de mantener el gobierno sin secretario general hasta que Trejo arregle sus desaseos legales, pues al diputado Gastélum ni siquiera lo han considerado; y segundo y más importante, dicen, porque “El Patas” quiere cumplir a sus electores -fue el único candidato a diputado federal del PAN que ganó un distrito en Tijuana en la elección de 2012- los tres años de labor legislativa para los que fue electo. Así que Gastélum a lo suyo, y algún día, la Notaría.