El fin de semana, una serie de tornados azotaron los estados de Arkansas, Oklahoma y Iowa en Estados Unidos, dejando un saldo de al menos 18 muertos y decenas de heridos y viviendas destruidas, según los reportes oficiales así como la devastación de ciudades como Vilonia en Arkansas, siendo ésta la localidad y estado más afectado junto con Quapaw en Oklahoma. En algunas zonas aún continúan los fuertes vientos y la caída de granizo. Durante el siniestro, cerca de 15 mil casas se quedaron sin servicio eléctrico, mientras que algunas se derrumbaron. Aun no existe una valuación de los daños materiales El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, mandó sus condolencias a las familias de los fallecidos desde Manila, la capital de Filipinas, donde se encuentra en gira de trabajo. Asimismo comisionó a Craig Fugate, titular de la Administración Federal para Manejo de Emergencias, la tarea de viajar a Arkansas y comenzar a coordinar la asistencia que se dará a las localidades afectadas. Los reportes meteorológicos señalan que en los próximos días serán los estados de Texas y Tennessee, quienes se verán afectados por la formación de nuevos tornados.