A 4 años del terremoto que sacudió a Mexicali

Asegura Indivi se atendieron las urgencias El viernes 4 de abril se cumplieron cuatro años del terremoto que sacudió Mexicali, su Valle y que arrojó a la calle a cientos de damnificados, tanto en la ciudad como en la zona rural y que –como respuesta gubernamental– implicó la creación de tres fraccionamientos populares que sumaron casi dos mil viviendas, cerca de dos mil familias que virtualmente empezaron de cero. Los tres fraccionamientos son distintos. Distinto el panorama, distinta la infraestructura, distinto el paisaje urbanizado. Pero enfrentan problemas comunes: la deficiencia en algunos servicios, la recolección de basura, la inseguridad, los robos, la falta de titulación de tierras, la incertidumbre jurídica en sus precarias posesiones, o la demanda de espacios educativos. La larga lista de necesidades es el reflejo de la indolencia gubernamental en tres comunidades diferentes y similares, que tienen notables avances, pero que aún esperan la conclusión de los populares proyectos. El Instituto para el Desarrollo Inmobiliario y de la Vivienda para el Estado de Baja California, Indivi, asegura que en el terremoto que azotó Mexicali el 4 de abril se atendieron las urgencias. Fueron un total de mil 751 viviendas –entre los tres fraccionamientos- con apoyo federal y estatal que sumó cerca de 36 millones de pesos, según lo explica Rubén Chávez encargado de la oficina en Mexicali del Indivi, instancia dependiente del Gobierno del Estado y que regionalmente encabeza Alejandro Monraz. “Finalmente las urgencias de repente ganan al proceso administrativo”, expone el funcionario en alusión a la falta de titulación de gran parte de esas viviendas. “Se estuvo en su momento buscando atender la necesidad de las personas y después se dejó un elemento muy importante, la certeza patrimonial”, refiere  comentando que el año pasado el gobierno estatal –aun encabezado por Osuna Millán- emitió un Decreto para exentar del cobro del título (cerca de 8 mil pesos cada uno) lo que posibilitó la titulación a todos los pobladores en el fraccionamiento Valle Nuevo, en el Kilómetro 43. Chávez comenta que aún está pendiente la entrega física a algunos de los residentes, por lo que el pasado fin de semana se preparó un evento público. La titulación implicó que ese fraccionamiento pudiera ser entregado a la esfera municipal. En los otros dos fraccionamientos, el funcionario del Indivi comenta que se está en la etapa para lograr la autorización final por parte de Administración Urbana del Municipio. Se trata –afirma el funcionario- de cuestiones técnicas, áreas que se movieron, subdivisiones, aunque asegura que para el 31 de agosto de este año ese proceso estará concluido, por lo que estarán en posibilidad de titular masivamente. “Ya recae en nuestra cancha el emitir los títulos, no ocupamos que la persona venga y nos lo solicite, no ocupamos nada, es cuestión interna”, expone el funcionario. “Hubo administrativamente un poco de desatención en su momento en los primeros años y se fue dejando, situaciones que se pudieron haber hecho de inmediato y se fueron dejando, la verdad nosotros lo retomamos y vimos que había que hacer algunas acciones muy puntuales con el Ayuntamiento”, señala Rubén Chávez. Sobre las cerca de 80 casas deshabitadas, refiere que al instituto solo le restan por entregar 22 viviendas –lo que pretenden hacer en un par de semanas- del resto todas fueron entregadas, aunque luego las personas tomaron la decisión de no vivir ahí. “Jurídicamente ya no son del Indivi, jurídicamente ya fueron entregadas, ya están acreditadas ante todos los fondos federales que se recibieron y para nosotros ya no están dentro de nuestro patrimonio”, expone Chávez, señalando que alguna de esa gente se fu a trabajar a Estados Unidos, a otros les quedaba muy lejos de su actual trabajo, otros migraron a otras partes del Valle o la ciudad. “Para nosotros ya son un tema concluido, desgraciadamente no podemos ejercitar ninguna acción legal para recuperarla. Porque se recibió en su momento, era para que la gente la habitara, la habitó un tiempo y se fue…” En cuanto a las zonas que tenían programadas para hacer más viviendas y que no se concretaron, el funcionario del Indivi explica que estas quedaron como áreas de reserva, los que promoverán este año –con apoyo federal- como lotes con servicios, con precios accesibles. Al preguntar el porqué de la marcada diferencia entre la infraestructura del Nuevo Hogar –en el (Delta-Oaxaca) con los otros dos fraccionamientos, Chávez responde con un “No tengo ahorita el dato…” y en referencia a la parta organizacional de los vecinos, refiere que la dependencia tiene un área de gestión social que “está un poco desatendida”, aunque también expone que buscan reestructurarla para “acompañar a los vecinos y orientarlos, asesorarlos en el tema de la organización vecinal” ya que en esa parte es donde se concreta o no el éxito de un desarrollo. En suma, Chávez calcula que para fines de octubre de este año se estaría cumpliendo con el cien por ciento de la titulación de los tres fraccionamientos y en dos semanas entregarían la veintena de casas que están pendientes. Este es un extracto del reportaje  “Queremos una vida digna”: vecinos del Valle.