Es el cuento de nunca acabar, la administración actual culpa a las anteriores por la herencia, mientras los sucesores inculparán a quienes ahora dirigen el Instituto Municipal del Deporte de Tijuana (IMDET). Mientras tanto, las unidades deportivas siempre tendrán carencias, necesidades de rehabilitación, remodelación o simple mantenimiento común. Es el padecimiento de una paramunicipal con 23 unidades a su cargo, además de otros 238 espacios deportivos bajo la mirada del ayuntamiento. “El problema de raíz es que no están regularizados los predios, del Estado se le entrega al Municipio y asumimos esa responsabilidad”, justificó el director del IMDET, Komar Rivera. Mientras tanto, el mal estado sigue vigente. Atención a problemas sencillos y significativos como rejas, lámparas, puertas y pintura, lucen insuficientes para el usuario común. “De todos modos son unas canchitas chafas”, expresó Manuel, quien solía correr en el CREA por la mañanas y decidió cambiarse a una cancha pequeña en La Mesa. Otros puntos periféricos, como El Rubí y Parque Azteca de Playas de Tijuana, han tenido problemas de servicios básicos. “El Parque Azteca estaba sin luz porque no estaba bien entregado. Platicamos con la gente de las Ligas, entre ellos y técnicos de aquí, pusimos la luz”, detalló Rivera acerca de la reciente reinstalación de alumbrado en Playas. Sin embargo, realizar otra actividad en las canchas de cemento y algo tan sencillo como poner una red o tener enderezado el aro de Basquetbol, es toda una aventura y requiere de improvisación. 
— Descartando la posibilidad de una inversión federal, ¿qué se puede hacer con el recurso propio del IMDET? “Lo que estamos haciendo ahorita, acercarnos con la sociedad, con asociaciones, clubes que ya están promoviendo el deporte. Si no lo hubieran hecho, estarían abandonados esos espacios”. Acorde a Rivera, lo que más le exige la comunidad deportiva es “material y mantenimiento. Yo me voy más con el reconocimiento, que sepan que están ahí los programas”. La participación de la ciudadanía se ha hecho a partir de comités deportivos, ellos conocen el entorno y canalizan las quejas y propuestas a los administradores. “En la (Unidad Gran) Tenochtitlan cercaron la unidad deportiva, le hicieron un hoyo a la cerca, quisimos llegar a taparlo, nos dijeron que lo dejáramos porque en la noche la gente que va en taxi pasa por ahí, si no, la unidad se queda sola. Tiene que haber esa interacción, que el ciudadano nos diga por donde”. En cuanto a la solución de los problemas físicos y materiales: “La respuesta es con dinero, pero no lo hay. Necesitamos una cultura del deporte, de conservar nuestros espacios. Si es tu unidad, tu grupo, pues mantenlo, si el que le da el uso no lo cuida, no se puede. Gobiernos van, gobiernos vienen, pero siguen los tijuanenses. He escuchado que dicen ‘a ustedes les pagan para eso’, con ese pago no se va a mantener”, señaló Komar. Para saber identificar las necesidades de cada espacio, se encuentra en proceso un registro de espacios deportivos, también da claridad sobre la manera de trabajar en espacios que no son unidades deportivas, como canchas de usos múltiples que bien pueden estar a cargo de los fraccionamientos, las delegaciones, pero sin una correspondencia específica hacia una dependencia gubernamental. “En el Mariano Matamoros hay una cancha de Basquetbol que ni aros tiene, pero nunca se usó. Si ahí hubiera habido jugadores, familia, no le pasa eso y ellos mismos lo ponen. En la ‘Tenoch’ desde la mañana hay corredores, no les interesa el deporte, pero sí les afecta que hay muchos perros. Con los que sí les interesa el aporte social, platicamos, nos dan la información de lo que se requiere, son los que observan. A las siete de la tarde pasa totalmente otra cosa. Hay miles de ejemplos. Son aspirinas, hay que arreglar el problema, que la cuestión de los predios quede resuelta”, subrayó el funcionario. El usuario común, el que va a cascarear o a caminar por las mañanas y no pertenece a ninguna Liga o grupo deportivo es testigo de cómo las canchas pueden ser utilizadas como basurero, mingitorio y cantina. La autoridad señala al ciudadano como copartícipe de la falta de cuidado. “Es cultura, quizá no lo erradicamos en tres años, pero lo estamos iniciando. La sociedad ha demostrado mucha disponibilidad en las unidades deportivas, la constante es la participación, que esté activo ese espacio, si no, no se puede. Tenemos presupuesto para el material de limpieza, tenemos gente de mantenimiento, pero el cuidado no se alcanza. Nosotros tenemos toda la disposición de proveer con material deportivo, con el comité activado se le da seguimiento”. — ¿Qué puede hacer el ciudadano para manifestar ideas o inconformidades? “Que se acerque con cualquier persona de la unidad o del Instituto, estamos abiertos. El registro de espacios públicos deportivos nos ha ayudado mucho, es informal. Estamos abiertos a todas las ideas, todas las propuestas, vamos a hacer esto lo mejor posible”, aseguró. El tema económico volvió a salir en el caso del campo empastado del CREA. Es imposible realizar actividad en ese pasto disparejo y casi muerto. De no ser por las lluvias recientes, no se hubieran realizado labores de oxigenación. Solo garantiza que seguirá sin uso. “Si quisiéramos hacer rehabilitación de raíz, es un dineral. En caso de no tener el recurso, vamos a tener una cancha bien, la idea es que permanezca con pasto natural y darle el uso adecuado, hacer una Liga municipal donde haya detección de talento, en el Atletismo se tiene que hacer aquí, en la Tijuana no se puede porque abajo del sintético hay cemento”, recalcó Rivera. Donde hay pasto sintético, como las unidades Tijuana, Reforma y Parque Azteca, se requiere mantenimiento más periódico que el natural y maquinaria especial. “Estamos buscando la manera de obtener el material, quizá tengamos que hacer como con las albercas, contratar a una empresa de fuera porque la maquinaria es costosa. Aun así, es más barato con sintético”, consideró el director. ZETA preguntó acerca de la manera de obtener recursos de mano propia, sobre todo considerando cargos como estacionamiento y cuotas de uso de instalaciones a las ligas. “De los 48 millones de presupuesto para el Instituto, doce millones y medio son de ingresos propios, lo demás lo prevé el ayuntamiento. Tenemos la facultad de hacernos de recursos, el presidente municipal nos pide que innovemos, nos hemos acercado a la iniciativa privada y asociaciones para buscar recurso y mantener lo que ya tenemos. Lo estamos buscando para que no le cueste al usuario, no le vamos a subir el costo de estacionamiento, estamos buscando otros mecanismos para hacernos de recursos”, garantizó. En cuanto a la seguridad, sin posibilidad de asignar personal, la “solución” ha sido la instalación de cámaras de seguridad. La periferia del CREA funciona como programa piloto. Los estacionamientos son insuficientes y el robo de vehículos en la calle es una constante. Vandalismo, destrucción de instalaciones y robo en las mismas, sobre todo de cableado, es otro problema recurrente. Las cámaras solo funcionarán si acude la Policía de inmediato. Recientemente, un individuo trató de llevarse a la fuerza a una joven en la Unidad Deportiva Tijuana, el personal que labora llamó a la Policía. La patrulla no llegó y fue el mismo personal, junto con los usuarios, quienes tuvieron que hacerse cargo de la situación. La dirección del IMDET ha sido una posición inestable. Por tercera administración consecutiva, quien comienza al frente de la paramunicipal, no terminará en el mismo cargo. Rivera heredó el cargo antes de que el XXI Ayuntamiento cumpliera cincuenta días. Al preguntarle sobre la posibilidad de su permanencia al término de la administración, no le tomó mucha importancia a largo plazo. “No es algo que me quite el sueño, lo hago porque me gusta. Agradezco al presidente municipal y reconozco que ha mantenido el equipo de trabajo, nos permite seguimiento. La idea de hacer una buena chamba no es para durar tres años. Es la primera vez que estoy como responsable, he venido infinidad de veces como usuario y me ha tocado que muchas personas han batallado. Me gustaría hacer los mecanismos diferentes para que cuando vuelva a ser usuario, ya no batallar igual”, puntualizó Komar Rivera. CEMEFU a pasos pequeños El Programa Nacional de Activación Física “Ponte al 100” estableció la creación de centros de evaluación para medir la capacidad funcional. En Tijuana, el Centro de Mediciones Funcionales (CEMEFU) se encuentra en la Unidad Deportiva CREA, cuenta con servicios de psicología deportiva, nutriólogo, preparación física y un coordinador para atender a los atletas locales y ciudadanos en común. El mayor obstáculo es la falta de conocimiento de su existencia. “Todos son bienvenidos, tanto las ligas, los clubes, el deporte estudiantil y popular. Las mediciones son completamente gratuitas. Siete personas ya salieron a otras unidades, se quedan trece personas aquí en el CREA. Aquí se les puede capacitar”, explicó la subdirectora técnica del IMDET, Laura Gutiérrez. El CEMEFU cuenta con alrededor de cuatro millones de pesos en equipo para rehabilitación, terapia física y reacondicionamiento físico. Cuenta con aparatos no fáciles de encontrar en cualquier gimnasio, a cambio de una modesta cuota de recuperación. “Cualquier persona que venga con una actividad, que quiera reactivarse, o bien, traiga la necesidad de ejercitarse, para eso existe un coordinador y preparadores físicos que hacen planeaciones, según como lo vaya necesitando el activado”, detalló la funcionaria municipal. Participan integrantes de clubes habituales en CREA, seleccionados municipales y, sobre todo, corredores. Por momentos, el CEMEFU luce completamente desierto. “Ha faltado un poco de promoción, hemos llevado el programa ‘Tijuana Actívate al 100’, es activarnos de cualquier manera, en el Instituto debemos promover para mover a la gente, ya llevamos 300 capturas, es una buena respuesta, pero queremos llegar a los puntos vulnerables; no es lo mismo llevar un programa a la Zona Este que en el centro, son diferentes situaciones”, comentó Gutiérrez. Otro detalle es el espacio destinado al CEMEFU. Debajo de las gradas, en uno de los antiguos vestidores de Futbol, queda muy reducido el espacio, pues no estaba pensado como un centro de mediciones. La administración pasada lo inauguró como un centro multidisciplinario, acorde a la subdirectora técnica, está en proceso la solicitud para ampliar y llevar el servicio a otros puntos de la ciudad, no únicamente en CREA, aunque también implica una inversión muy fuerte para obtener aparatos. “No estamos inventando el hilo negro, estos programas ya estaban aquí, hay que utilizarlos con las personas adecuadas, una persona capacitada para utilizar este tipo de aparatos. Vengan, vean las instalaciones, sirven bastante, vean un manejo integral para un deportista o un activado, es para toda la comunidad. Se les explica y concientiza para que sepan qué hacer y lleven el programa durante tres meses. Es impresionante el impacto que ha tenido con las personas que se han acercado”, invitó. Eso sí, se vistieron con sus mejores galas para recibir a la televisión la mañana del miércoles 5 de marzo. Acarreados para un servicio que no requiere falsas promesas, solo visitantes. Retoman CID Con cerca de 110 promotores en las nueve delegaciones, los Centros de Iniciación Deportiva iniciaron actividad el lunes 3 de marzo. El programa cuenta con más de una decena de disciplinas, incluyendo el debut de Ciclismo, Patineta, Esgrima y Futbol de Banderas. Los días y horarios varían por delegación, la mayoría cuenta con clases en lunes, miércoles y viernes, a partir de las 8:30 am y hasta las 9:00 pm. El servicio es gratuito y forma parte de “Tijuana Actívate al 100”. “Más que hacer deporte, es la activación física. Antes que hacer campeones, hay que ayudarlos a crecer sanamente. Tenemos programas para la tercera edad, para la mujer y de capacidad psicomotriz. Primero vamos por la salud”, aseguró el jefe de Departamento de Deporte para Todos, Eliseo Sandoval.
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