A quien en la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana ya identifican como director adjunto, es a Jorge Ramos Hernández. Aseguran que el panista, que no las tiene todas de su lado y que no fue llamado a colaborar en el gobierno de Francisco Vega de Lamadrid, hace y deshace a su antojo, con la venia de Alfonso Álvarez Juan, a su decir empresario, a decir del electorado, un derrotado tecatense, y a designación del gobernador, director de la CESPT. Pues aparte de entregar los cargos de esa conocida agencia de colocaciones azul -empleados señalan que ya hasta Leonardo Fernández cobra en la dependencia-, poco o nada sabe de las obras y los cortes de agua. A Don Alfonso le ha dado por congraciarse -vía nómina- con los diferentes grupos del Partido Acción Nacional. Vaya manera de hacer méritos… contra el gobernador.