El mundo de las letras universales está de luto, otra vez. La tarde del miércoles 5 de marzo de 2014, murió el filósofo Luis Villoro, a la edad de 91 años. Luis Villoro Toranzo fue miembro de El Colegio Nacional desde 1978, doctor en Filosofía por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) e Investigador Emérito de esa misma institución. El intelectual español formó gran parte de su trayectoria en México. Nació el 3 de noviembre de 1922 en Barcelona. Entre su extensa bibliografía figuran los siguientes títulos, publicados en el Fondo de Cultura Económica (FCE): “El Concepto de Ideología y Otros Ensayos” (1985), “El Pensamiento Moderno. Filosofía del Renacimiento” (1992), “En México, entre Libros: Pensadores del Siglo XX” (1994), “Los Grandes Momentos del Indigenismo en México” (1996), y “El Poder y el Valor” (1997). En los últimos años, Villoro entregó al FCE “De la Libertad a la Comunidad” (2001), “Los Retos de la Sociedad por Venir. Ensayos sobre Justicia, Democracia y Multiculturalismo” (2007), y “El Proceso Ideológico de la Revolución de Independencia” (2010). Entre otros reconocimientos, mereció el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Ciencias Sociales, Historia y Filosofía en 1986; Premio Universidad Nacional en Investigación en Humanidades 1989; y el Premio Juchimán de Plata en Ciencia y Tecnología (1999). En 1989 fue nombrado investigador emérito del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM. Además, fue embajador y delegado permanente de México ante la UNESCO en París, de 1983 a 1987. Asimismo, fungió como presidente de la Asociación Filosófica de México, y recientemente, fue miembro del Consejo Académico de la Universidad de la Ciudad de México, de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, y del Consejo Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas. Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA), emitió el siguiente tuit a través de su cuenta @rtovarydeteresa: “Murió Luis Villoro, hombre de ideas y convicciones. Amigo respetado con quien compartí experiencias diplomáticas en Francia. Abrazo a Juan”.
Publicidad
