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miércoles, octubre 2, 2024
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Vendiendo a México

Sortilegioz Lo que molesta a los mexicanos es la portada. Enrique Peña Nieto, pulcro, copete engominado, traje a la medida e impecable. Altivo, con los brazos al frente de su humanidad y entrecruzando las manos. Luego la cabeza de la nota: SALVANDO A MÉXICO. En letra pequeña, pero muy visible e impactante, dice: “Cómo las reformas de gran alcance de Enrique Peña Nieto han cambiado la narrativa de su nación marcada por el narco”. Ésa fue la descripción sobre la primera plana de la revista norteamericana TIME, de próxima circulación. Los comentarios entre periodistas críticos, analistas y oposición, son de sorna. Los de los mexicanos que viven, comentan, navegan y opinan en Internet, también son de burla, pero van más allá. Llegan al punto del linchamiento mediático al reportero que escribió la obra periodística, Michael Crowley. Las parodias con la portada de TIME caricaturizando al Presidente de México, ridiculizándolo, satirizándolo y humillándolo, se cuentan por cientos en portales, blogs, sitios noticiosos, y especialmente en redes sociales como Facebook y Twitter. Aquí en la parte inferior una muestra de las mismas. El odio mediático hacia la presunción de que Peña está salvando al País con sus reformas, se da, asumo, debido al contexto no solo de inseguridad que priva en México, acaso con mayor razón se funda en el descontento social provocado, precisamente, a raíz de la aprobación de las reformas de Peña y los efectos negativos que han llevado a la vida cotidiana de los mexicanos apenas a 6 semanas de su laberíntica implementación. La portada en su versión digital de la revista TIME donde aparece Peña “salvando a México”, circula a escasos días que el decano de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia en Nueva York, Estados Unidos, Steve Coll, declaró que México, junto a Paquistán, son los dos peores lugares del mundo para el ejercicio del periodismo. Se hace pública la imagen de un Peña salvador, tres días después que maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación apedrearon la comitiva del Secretario de Educación Emilio Chuayfett, precisamente por las afectaciones de la reforma educativa. También ocurre el hecho de la revista internacional, a dos días que la Secretaria de Desarrollo Social del “salvador” Enrique Peña Nieta, es decir Rosario Robles, concluyó una gira por el estado de Baja California Sur, en donde, como parte de la cruzada contra el hambre del Presidente, entregó tarjetas con dinero por un monto de 338 pesos mensuales, para acabar con la pobreza de muchos. De igual manera, la portada llega a un día que en Tijuana, Baja California, empresarios y abogados presentaron un amparo colectivo ante los Juzgados de Distrito, contra la homologación del IVA en la frontera de un 11 a un 16 por ciento, y que fue firmado y auspiciado por más de 58 mil ciudadanos que se consideran afectados por la reforma fiscal de Peña Nieto (habrían sido miles más, pero muchos apoyos se anularon por estar incompletos o contaminados en su contenido). Y por supuesto, la portada se conoce en México, una semana después que el Comisionado Presidencial para la Seguridad en Michoacán, Alfredo Castillo, se reunió, por error, por omisión, por ignorancia o tal vez por conveniencia, con Juan José Farías Álvarez “El Abuelo”, uno de los hombres acusados en tierra michoacana de ser parte de la criminalidad que ha sumido a esa región en una de las más violentas del país. La realidad de lo que sucede en México, en las calles y avenidas del país, en pueblos y municipios, está muy alejada de lo que reza en la portada de la revista TIME. Para los mexicanos pareciera que Peña no está salvando a México. Los mexicanos, a diferencia de los extranjeros, padecemos al Presidente, los días que se encuentra en territorio nacional, y las decisiones que toman sus colaboradores –léase Miguel Ángel Osorio Chong y Luis Videgaray Caso, de Gobernación y Hacienda respectivamente. Porque ésa es otra cuestión. La portada de TIME aparece justo seis días antes de la visita a México por parte del Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama. Otra verdad es que Enrique Peña Nieto vende a México en el extranjero y lo vende muy bien. Habla de su entorno, sus objetivos y sus procesos, así lo hizo en Francia, en Suiza, en Oriente y recientemente en Cuba y en Colombia. El Presidente habla de sus reformas en el extranjero y concede entrevistas a extranjeros, a políticos y a periodistas. El Presidente cosecha en el extranjero lo que no le florece en México. Se vende bien pues, y vende a México… a quien se lo compre. El artículo completo de la revista TIME aún no llega por la versión impresa, en el internet se puede leer una introducción que va en el mismo sentido del “salvador” de México, refiere por ejemplo que a diferencia de hace cinco años cuando los temas en nuestro país eran la violencia por las drogas, la recesión económica y una sospecha del Pentágono que ligaba a México con un caso de terrorismo paquistaní, “ahora las alarmas acerca de México han sido reemplazadas por el aplauso”. Es evidente que la política de silencio oficial respecto a la inseguridad en México, los cárteles, los ejecutados, las drogas, la pobreza y la injusticia, ha pegado, se ha vendido bien… en el extranjero. Acá, es otra realidad la que tanto preocupa y hasta desespera a los mexicanos.  

Autor(a)

Redacción Zeta
Redacción Zeta
Redacción de www.zetatijuana.com
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