La NFL está explorando la posibilidad de implementar una nueva regla en contra del racismo y hostigamiento dentro del terreno de juego. La falta sería una penalización de 15 yardas a los jugadores que utilicen lenguaje impropio, y de continuar durante el encuentro con la mala disciplina sería suspendido del partido. Esto se da luego del caso de la segregación que surgió en la temporada pasada en el equipo de los Delfines de Miami, donde el jugador Ritchie Incognito fue acusado por su compañero de equipo Jonathan Martín de molestarlo constantemente lo que lo obligó a dejar el equipo a media temporada. Se espera que el próximo mes, la propuesta sea discutida dentro de la reunión de propietarios de equipos de la Liga.