Poseedora de un talento innato que la convirtió en la niña más exitosa de Hollywood en los años 30s murió la madrugada de este martes 11 de febrero de causas naturales en su casa en Woodside California, tenía 85 años. La niña prodigio como muchos la conocían, comenzó su carrera artística a los 3 años de edad, su popularidad se desarrollo gracias a su facilidad para bailar, cantar y actuar que la colocó como una de las actrices infantiles más famosas de la meca del cine estadounidense. Aunque comenzó haciendo pequeños papeles para televisión, Shirley logró consagrarse cuando obtuvo su primer protagónico en el cine con Bright Eyes en 1934. Luego vendrían otras participaciones importantes como: “The Lttle Colonel”, “Curly”, “Top”, “Wee Willie Winkie”, “Heidi”, “A Little Princess”, entre muchas más, todas ellas realizadas entre 1930 y 1940. Sus hermosos rizos, carita angelical pero sobre todo su talento, cautivaron por muchos años los corazones de la gente. En 1950 se retiró del mundo del espectáculo para más tarde convertirse en diplomática de los Estados Unidos de América. Descanse en Paz la gran Shirley Temple