Raúl “Rayito” Hirales Jr estaba en la esquina contraria cuando Francisco “Frankie” Leal se desplomó en Cabo San Lucas. Tres días después, Raúl vivió la peor pesadilla para cualquier boxeador cuando el mexicalense falleció. Apenas han pasado unos días desde la muerte de Óscar “Fantasma” González, a quien Hirales derrotó en 2012, seguramente sonarán doce campanadas en su memoria durante la función del sábado en Tijuana en la Arena Tecate, pero Raúl no dejará que el recuerdo de un momento trágico lo detenga. “Al principio fue más difícil, ya está un poco más asimilado. Hemos trabajado con terapias y psicólogos, el apoyo siempre de mis padres, mis hermanas, mi esposa y mis hijos y sobre todo amigos que siempre están al pendiente de mi carrera, me han hecho seguir aquí y seguir luchando por lo que quiero”, expresó el paceño. El boxeo mexicano ha cobrado dos vidas en menos de cuatro meses, Raúl destaca el trabajo anterior a la pelea como la clave para subir al ring con seguridad. “Confío plenamente en la preparación que llevo en el gimnasio y fuera del ring, siento que soy una persona sana, no tomo y no fumo, eso tiene mucho que ver, cómo llego al combate conforme al peso, no bajar tanto de golpe y confío plenamente en la preparación que llevo, en la vida que llevo”, evaluó. “Un entrenador siempre te va a exigir, sobre todo he ido aprendiendo a que no me gusta pasar hambre ni sed y me cuido para llegar en óptimas condiciones a un combate, he aprendido a no desvelarme, los años no pasan en balde y uno va resintiendo eso con el paso del tiempo, trato de ir aprendiendo y de cuidarme cada vez más. Siempre tratamos de estar al cien y esta vez no será la excepción”, añadió. Hirales (20-2-1, 9 KO) originalmente iba a enfrentar a Jonathan Oquendo, un cambio de planes dio pie a una pelea de desempate con el púgil local Francisco “Ferocito” Vargas (26-7-3, 18 KO). “A aprovechar la oportunidad del desquite, de demostrar quien verdaderamente es el mejor, nos preparamos para una pelea sin importar el rival, estamos listos para subir al ring”, aseguró el “Rayito”. Se toparon a seis giros en 2010 con fallo de empate mayoritario. Una tarjeta favoreció al de Tijuana 58-56. “Para mí estuvo muy reñido. Era un buen empate, ahora sí nos vamos a dar con todo”, mencionó Vargas. “Estamos de regreso”, dijo Raúl emocionado, “no se van a llevar una decepción. Sigan apoyando, la afición de Tijuana es súper aficionada al Boxeo”, complementó. La pelea Hirales-Vargas II respaldará al choque entre Miguel “Barreterito” Beltrán y Carlos “Chuko” Díaz, pactada en peso súper pluma. Beltrán se coronó “Campeón Azteca” en Tijuana y ha peleado por títulos mundiales. “Sabemos que el público es exigente aquí, van a tener una buena batalla el sábado”, prometió. Su rival, con ligera ventaja de estatura, llegó seguro de salir con el brazo en alto. “Sé que mi rival es respetable y yo también, pero yo vengo aquí a ganarle. Tanto él tiene la dinamita como yo de acabar la pelea con un golpe, por eso digo que voy a ganar”, confió Díaz.
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