Seis integrantes del grupo Pussy Riot fueron agredidos a latigazos por milicias cosacas cuando intentaban realizar una presentación debajo de un cartel que promociona los Juegos Olímpicos de Sochi. La banda se hizo famosa en 2012 al entrar en la catedral de Moscú y realizar una “oración punk”, en la que pidieron a la Virgen María que salvara a Rusia de Putin, quien estaba a punto de comenzar un tercer período como presidente. Entonces, dos integrantes del grupo, Tolokonnikova y Maria Alehkina, fueron sentenciadas a dos años de prisión, pero fueron liberadas en diciembre, gracias a una amnistía considerada como un intento del Kremlin por apaciguar a los críticos antes de los Juegos Olímpicos. Pussy Riot es un grupo que realiza arte en vivo con inclinación feminista y que graba sus presentaciones para convertirlas en videos musicales, se ha convertido en un símbolo de los que critican al gobierno de Putin y lo consideran autoritario, especialmente por la situación de los derechos humanos y de los gays.