Secretaría de Salud: 139 posibles casos en BC

Un piso repleto de enfermos conectados a ventiladores mecánicos, medicamentos caducados desde hace cuatro meses, pacientes intubados sin los sedantes necesarios, escasez de guantes y cubrebocas, pruebas de diagnóstico no confiables. En estas condiciones, personal médico atiende el brote de influenza AH1N1 en Baja California. Encima, las amenazas por parte de las autoridades para mantener en secreto la situación en los centros de salud. Un médico resume que por lo menos en el Hospital General de Playas de Rosarito, “los hospitalizados por influenza no salen hasta que fallecen”. Hasta el 23 de enero, la Secretaría de Salud del Estado confirmó 139 “posibles” casos de H1N1. Aunque la cifra oficial seguía en los siete muertos por este virus, se habían registrado seis casos más en espera de confirmar. Sin embargo, al viernes 24 de enero, la cifra de decesos por esta enfermedad podría ascender a 14. Y es que las pruebas de diagnóstico no son del todo confiables, confiesan médicos adscritos a la Secretaría de Salud. La prueba rápida consiste en recoger una muestra de secreción o mucosa nasal y colocarle en un tira, pero solamente “indica que el paciente tiene influenza, no qué tipo de virus, por ello hay tantos resultados falsamente positivos o falsamente negativos”. El método de diagnóstico que brinda mayor exactitud es la prueba PCR, pero obtener los resultados puede llevar hasta dos semanas. Las muestras son enviadas a la Ciudad de México para su análisis. Por ello, un médico advierte: “Los resultados llegan cuando es muy amplio el abanico al cual expuso el paciente a sus familiares, compañeros de escuela o trabajo y personal médico”. Al respecto, un médico que atendió el primer brote -hace casi cinco años- mientras laboraba en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), manifiesta: “Se está propagando con mayor rapidez, pero también se están tomando las medidas de prevención de manera más rápida, porque se han visto más fallecimientos que en 2009”. Un segundo especialista explica: “La Influenza tipo AH1N1 nos ha dado varias caras, desde una forma sencilla, hasta una gripe multiplicada en intensidad seis veces”. Para ilustrar, cuando un paciente es recibido en Urgencias con un cuadro de gripe, se le canaliza a una valoración al área de Epidemiología o Viral. Los primeros estudios de diagnóstico consisten en toma de radiografías. Cuando los destellos de radiación electromagnética atraviesan el pecho, los pulmones quedan registrados en las placas de Rayos X como objetos negros. No en el caso de los portadores de algún virus de influenza, cuyos pulmones “se ven prácticamente blancos”. “Es un virus que causa inflamación del pulmón, es decir, neumonitis o bronquiolitis, que daña el tejido pulmonar porque produce demasiado líquido, se llenan prácticamente de agua”, refiere el médico. Así, de simular un globo de aire, el pulmón se asemeja más a una esponja llena de agua.   En Rosarito “se está saliendo de control” En el Hospital General de Playas de Rosarito, “ya no se puede con este tipo de pacientes, están llegando demasiados y se está haciendo el sitio de concentración más grande”, confirma personal en contacto con los pacientes. En promedio, este centro de salud recibe diez nuevos casos a la semana. Uno de los médicos confirma: “Es muy raro el paciente que salga con éxito y con vida”, calcula más de 20 decesos por cuadros similares a la influenza AH1N1. La mayoría de los hospitalizados, permanecen hasta 15 días en el hospital. Contrario a las características demográficas de otras poblaciones de hospitales, en este nosocomio, los pacientes son, en su mayoría, jóvenes de 25 a 40 años. Un médico reporta que “los casos que he atendido, la gran mayoría comparten una historia clínica de obesidad, tienen dos o tres trabajos, con altos índices de estrés, desvelados y mal alimentados”. La situación se vuelve aún más crítica cuando se considera la situación en que labora personal médico. “Ya no tenemos insumos para trabajar, nos faltan medicamento y ventiladores mecánicos, a pesar que adquirimos 25 más”. Con hasta 24 pacientes en un piso aislado para contagiados de AH1N1, en Rosarito, se trabaja en la habilitación de un piso más. Las condiciones de los pacientes tampoco son las más óptimas. Debido a la gran cantidad de líquidos acumulados en el tejido pulmonar, el organismo de un paciente no puede inhalar y exhalar oxígeno con la misma facilidad. Necesitan estar conectados a aparatos de ventilación mecánica. Pero sin los sedantes adecuados para la intubación, el proceso es doloroso para los pacientes. “Cuando intubamos a un paciente, tiene que estar sedado”, expresa uno de los doctores. Si este proceso es complejo, la falta de analgésicos lo vuelve más. Para intubar, se requiere de un aparato metálico que separe la lengua y permita introducir un tubo por la tráquea. Aquí entran en acción, analgésicos y narcóticos como la buprenorfina, pero el hospital ya no cuenta con este fármaco. “Intubamos con lo que tenemos a la mano, como diazepam (utilizado generalmente para trastornos de ansiedad) o clonazepam (utilizado generalmente para controlar convulsiones), pero hemos tenido mucha carencia específicamente para combatir el dolor”, expone. Ni siquiera los antivirales funcionan en este hospital. Tamiflu es utilizado para detener su propagación en el cuerpo, los disponibles ahí caducaron desde 2013. De hecho, este medicamento se encuentra agotado en las farmacias Roma de Tijuana y en otras, como Gusher, una caja de tabletas tiene un costo de hasta 690 pesos. “Tenemos una carencia impresionante de antibióticos como ceftriaxona, cefotaxima”. La necesidad de administrar antibióticos a los pacientes conectados intubados, es porque este aparto contiene a su vez, otro tipo de bacterias, esto vuelve el cuadro de neumonía más agresivo, porque hay componentes de virus y componentes de bacterias”. En retrospectiva, un médico que labora en el sector público y privado, considera que la Secretaría de Salud “no trabajó en medidas de prevención, como suele suceder ante los brotes, nos quedó la historia y la estadística de los casos. Dejaron de buscar estos casos entre la población, quienes tomamos curso para manejar, volvimos a identificar algunos casos aislados durante estos años”.   IMSS, ISSSTE e ISSSTECALI también reportan casos Por lo menos en la clínica ISSSTECALI El Mirador en Tijuana, hay tres pacientes hospitalizados en la Unidad de Cuidados Intensivos, clasificados como “probables” casos de influenza. De 60, 51 y 40 años, llevan entre 41 y seis días de hospitalización. Aunque sin confirmar aún como casos de influenza AH1N1, en las últimas semanas se han registrado tres decesos a raíz de “un cuadro de síntomas similares a la neumonía o influenza”, comentó personal médico. En el área de Urgencias del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tampoco hay casos confirmados de influenza, aunque en un turno, acuden hasta cinco pacientes con síntomas similares, a la semana solamente dos son considerados “sospechosos”. Entre los pacientes del IMSS con pruebas positivas de este virus, dos salieron con vida, un contador y un trabajador de Zeta Gas. “Algunos pacientes se han recuperado porque tenemos el equipo básico, pero estamos al borde de quedarnos sin aparatos respiratorios, ventiladores”, advierte un doctor. Mientras que en la clínica del ISSSTE “Fray Junípero Serra” se han contabilizado cuatro posibles muertes por influenza, en espera de la confirmación de resultados enviados a la Ciudad de México. El sector privado también ha reportado casos. Un médico con su consultorio en la colonia Cañón del Sainz, ha recibido en enero hasta cien pacientes con cuadros similares a la influenza o neumonía.   Al Hospital General de Tijuana “llegan graves” Así como en Rosarito, los pacientes que llegan al Hospital General de Tijuana, presentan cuadros muy avanzados de la enfermedad que derivan en complicaciones. “La gravedad de los pacientes varía, algunos se manejan de forma ambulatoria -sin necesidad de hospitalización-, y otros sí son internados en la Unidad de Cuidados Intensivos con soporte ventilatorio”, afirma un médico. “La mayoría de los pacientes graves son adultos jóvenes, al igual que en 2009”, agrega. De hecho, todos los días se registran largas filas de pacientes que acuden a recibir la vacuna gratuita. A diferencia del IMSS, donde se aplican las vacunas solamente a la población con mayor índice de riesgo con diabetes, obesidad o enfermedades crónicas como cáncer, en el Hospital General, toda la población está siendo vacunada. Otro especialista que labora en este nosocomio detalla: “Los pacientes fallecen porque llegan muy graves y no los alcanzamos (a salvar) con el tratamiento, porque la enfermedad ya está en etapas avanzadas, el daño ya es extenso”.   La versión oficial Ismael Ávila, subsecretario de Salud en Baja California, expresó a ZETA que del primero de enero de 2014 a la fecha, solamente se han confirmado en la entidad 28 casos de influenza AH1N1. De las 49 muestras procesadas de pacientes fallecidos, siete resultaron positivas por este virus.  Señaló que de los casos estudiados por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicas (InDRE), 13 personas han perecido por enfermedades respiratorias, entre éstas neumonía; pero únicamente de estos casos, siete de los decesos corresponden al virus H1N1. “Están por enviarnos 95 resultados más que se están analizando,  aunque el nuevo corte de influenza se dará a conocer el viernes 24 de enero”, declaró  Dos días después, el número de posibles casos aumentó a 139. “Nuestros números corresponden a 13 defunciones, siete por H1N1 y seis por enfermedades respiratorias”. De acuerdo a cifras proporcionadas por el subsecretario de Salud, de los siete decesos, tres casos corresponden a Mexicali y cuatro a Tijuana. De las 270 mil vacunas disponibles desde la segunda semana de enero, quedan poco menos de 50 mil dosis, por lo que se recomienda vacunar a los menores de 5 años, adultos mayores de 60, diabéticos, embarazadas y personas con obesidad, “que son los factores que nosotros hemos tratado de impactar”, revela el médico. A pesar de esto, la mayoría de los pacientes fallecidos en el Hospital General de Tijuana y de Rosarito, tenían entre 20 y 40 años  de edad. “Las familias sufren viendo por la muerte de los pacientes, y nosotros porque no tenemos los insumos necesarios. Las autoridades no deben negar la existencia del problema ni su seriedad”, finaliza uno de los médicos consultados, quienes solicitaron el anonimato por temor a represalias. Inés García Ramos La Secretaría de Salud de Baja California, a cargo de Mario Osuna Millán, no cuenta en su portal con información de los síntomas de la Influenza H1N1 o con recomendaciones para evitar contraer el virus. Los puntos que a continuación se presentan, fueron tomados de páginas oficiales del Sector Salud.   Recomendaciones * Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón. * Limpiar y mantener ventilada la casa, zona de trabajo y otros lugares que la persona frecuente. * Mantener limpios barandales, teléfonos, chapas y demás objetos de uso común. * Lavar frecuentemente vestimenta. * Taparse boca y nariz con la parte interna del brazo, o con un pañuelo  al estornudar o toser. * Evitar cambios bruscos de temperatura. * No saludar de beso, ni de mano. * No compartir alimentos, platos, vasos o cubiertos. * Mantenerse alejado de personas que presenten infección respiratoria. * Evitar escupir en superficies expuestas. * Ir al médico si presenta algún síntoma.   Síntomas * Fiebre alta (mayor a 38 grados). * Dolor muscular y de articulaciones. * Dolor de cabeza intenso. * Cansancio. * Escurrimiento nasal. * Dolor de garganta. * Dolor de ojos. * Diarrea (en ocasiones) * Malestar general.