El Instituto Municipal de la Mujer, que en la administración de Carlos Bustamante tituló Lourdes Inzunza -sí, la pareja del ex alcalde que no fue primera dama, sino directora-, es señalado de corrupción por la impresión de un libro sobre las mujeres pioneras de Baja California. De hecho, no se pagó por el encargo editorial. Resulta que con presupuesto para textos, estudios, análisis y documentos varios, el Instituto de Cultura de Baja California aprobó la edición que fue escrita por el eterno aspirante priista (y siempre derrotado) Carlos Barboza Castillo, y en colaboración con IMMUJER, decidieron compartir los gastos: 30 mil pesos en total. Para la edición del libro que recordó la participación política, social y mediática de las mujeres en el estado, cada dependencia pagaría 15 mil pesos, y cuando del Instituto de la Mujer expidieron el cheque, debido a los cambios en el ICBC, la emisión no se cobró. A punto de concluir el periodo de Inzunza, el contador le informó: “Debemos cancelar el cheque, porque el libro de Barboza no lo cobraron y debemos cerrar el ejercicio”. Y así sucedió. El problema no es, pues, que haya desviado el recurso que para ello estaba etiquetado, sino que ¡ni siquiera lo pagaron! Pero ya por la rotación en el Gobierno del Estado, el caso de corrupción pasó a omisión. Qué cosas.
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