En el año que inicia, el Gobierno del Estado de Baja California que Francisco Vega de Lamadrid anunció, juró y prometió que sería austero, pero gastará más donde menos se requiere, y menos donde más se necesita. Siguiendo con el presupuesto por arriba de los 39 mil millones de pesos que en los días previos a la Navidad y al fin de año 2013, le aprobaron los diputados locales para el ejercicio 2014, resulta que, por ejemplo, mientras José Guadalupe Osuna Millán destinó en su último año de gobierno el 5 por ciento del presupuesto del Estado para obra pública, Kiko Vega únicamente destinará el 1 por ciento al mismo rubro. Luego, siendo Baja California costa y campo, de los 418 millones de pesos que en 2013 se destinaron en el Gobierno del Estado para pesca y agricultura, este año, el gobernador y su secretario de Finanzas determinaron disminuir el presupuesto en común a 221 millones de pesos, lo que significa 197 millones de pesos menos para invertir en las clases más necesitadas de la cadena productiva bajacaliforniana, los campesinos y los pescadores. En Seguridad Pública, donde en los últimos años se invirtió precisamente para disminuir el problema fatal de la inseguridad en Baja California, que tanto afecta a los ciudadanos a partir de la comisión de delitos como secuestro, asesinato, extorsión, fraude y otros que emprende el crimen organizado contra la sociedad de bien, Vega disminuyó el presupuesto para esa sensible área en 500 millones de pesos. Y bueno, no hay un sector específico al que se destinen todas esas disminuciones presupuestales en su conjunto, es decir, esos 500 millones de pesos menos a seguridad no van en su totalidad a Desarrollo Social o a desarrollo económico, sino que se rebajaron los presupuestos para meter los dineros en todas partes, para fraccionar lo que ya estaba etiquetado para un bien mayor, en pequeños beneficios que a final de cuentas, ni se ven ni se sienten, y pocos los disfrutan. Ya en la última edición de esta columna en ZETA, le comenté cómo a pesar de decir que se habían disminuido los sueldos, todos los gastos en las áreas de sueldos, prestaciones, canonjías y servicios generales, habían incrementado en el presupuesto 2014 de Kiko Vega. Pues, hay más, y ahí le va para que vea en qué se gasta el dinero oficial: En material impreso y de apoyo informativo, lo que sea que eso signifique, pero huele a propaganda, hubo un crecimiento del 43%, hasta llegar a los 2 millones 13 mil 302 pesos con 21 centavos. Mire, a los bajacalifornianos nos costará la alimentación de personal del gobierno de 2014, un millón 275 mil pesitos, mientras en agua y hielo se gastará 16% más que el año pasado. Tan solo en esos dos conceptos, un millón 947 mil 271 pesos, mientras que en cafetería será el 33% más que en 2013, hasta llegar a un millón 487 mil 743 pesos. En comidas para actos de gobierno, 10 por ciento más: 143 mil 800 pesos. Mismo aumento en la gasolina para quienes trabajan en el Gobierno del Estado: 118 millones 447 mil 783 pesos, y 61% más en lubricantes y aditivos, para un total de un millón 144 mil 214 pesos. Ahí le va más. En época de austeridad gubernamental como la anunciada, uno pensaría que los gastos superfluos o esos que todos ahora hacemos por nuestra cuenta, los pagarían los funcionarios con sus decorosos sueldos, pero no. A diferencia del alcalde de Tijuana, que ha ahorrado millones de pesos en no pagar celulares ni radios para personal, el gobierno de Kiko incrementó en un 13 por ciento -más del 5% de IVA que se nos viene- el dinero para pago de celulares, que costará a los bajacalifornianos en 2014, la friolera de… ¡6 millones 633 mil pesos! En telefonía, un incremento de 7% hasta quedar en 34 millones 416 pesos lo destinado en 2014, mientras que por pago de internet, redes y procesamiento (¿?), se etiquetaron 422 mil pesos, lo que significa un 48% más de lo gastado el año pasado. Donde hubo un 2 mil 329 por ciento de incremento fue en el presupuesto para renta de equipo de transporte, que quedó en 32 millones 992 mil pesos, no se aclara si es transporte masivo o transporte particular, o transporte comercial, solo que subió muchísimo. La austeridad tampoco alcanzó el presupuesto para consultorías administrativas, pues a pesar de lo que se paga a los funcionarios y demás colaboradores, para esa área se destinaron 2 millones 472 mil pesos, que en relación a lo pagado en el último año de Osuna Millán por ese concepto, Consultorías Administrativas, hubo un aumento del 582%. Para copias, sí, para copias, el presupuesto subió en 160%, hasta llegar a 199 mil pesos. Y aquí una joya textual del exceso: “Otros Servicios Profesionales, Científicos y Tecnológicos”, no especifica cuales, 231 millones 709 mil 780 pesos, se incrementa en 3 mil 737 por ciento, y pasa de 6 a casi 232 millones”. Y como el que reparte y comparte se queda con la mayor parte, el secretario de Finanzas creó la partida de “Contingencias Socioeconómicas y Financieras”, que por supuesto maneja su oficina, y a la que dedicó 245 millones de pesos. En tiempos de cámaras digitales, redes sociales e iPhones, el gobierno de Kiko Vega destinará 57 mil pesos para “revelado de fotografías”,, mientras que para el área de “creación y difusión de contenido” –también suena a propaganda- fueron 500 mil pesos, 3 mil 25 por ciento más que en 2013. Otros servicios de información, un millón y medio de pesos, 36% más. ¿Viajes? ¡Claro! Para pasajes aéreos se destinaron 10 millones 734 mil pesos, casi 11% más que el año pasado. Pasajes terrestres, un incremento del 70%, con un millón 613 mil pesos. Viáticos para disfrutar en el país, 18 millones 678 mil pesos; hospedajes nacionales, 13 millones 96 mil pesos; renta de vehículos por comisiones, 359 mil pesotes (119% más que en 2013). Viáticos en el extranjero, un millón 119 mil pesos, 112% más a lo ejercido en 2013; al igual, un 24% más para hospedajes en el extranjero, traducidos en un millón 656 mil pesos. Otros servicios por comisiones en el país y en el extranjero -no especifica qué clase de servicios-,323 mil pesos, 347 por ciento más. Peajes en carreteras, 5 millones 708 mil pesos. Hospedaje y pasaje de invitados, un millón 656 mil pesos, 23% más a lo ejercido el año pasado; mientras para exposiciones, 5 millones 11 mil pesos, 16% más a lo aprobado en 2013; reuniones de trabajo, 3 millones 810 mil pesos, 19.62% más; gastos de gobierno 2 millones 814 mil pesos; y gastos de representación, Casa de Gobierno, un millón 746 mil pesos, que significa un 49% de incremento a lo ejercido en 2013 por José Guadalupe Osuna Millán. Y así están los gastos que interesan al gobierno, que anuncia austeridad, pero presupuesta otra cosa… ¿O no?
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