Maneadero sin agua

Representantes del Ejido Nacionalista de Sánchez Taboada, advierten que la escasez de agua en los acuíferos del Valle de Maneadero, se ha convertido en un serio problema para la supervivencia del sector agrícola en esa zona. Encabezados por Raymundo Carrillo Huerta, presidente del comisariado ejidal, en los últimos días han sostenido reuniones con autoridades de gobierno, en busca de una solución rápida a la inminente crisis por el recurso, que se ha agravado tras una temporada de lluvias donde el agua simplemente no llega. Al problema que viven se suma, al igual que en la región del Valle de Guadalupe, que la ciudad de Ensenada demanda cada vez más agua de sus pozos, y el recurso que originalmente tenía un destino agrícola, es enviado a fraccionamientos y zonas habitacionales en la zona urbana, a través de las redes de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada, secando literalmente los valles. El 17 de enero de 2014, el Ejido Nacionalista reclamó a la CESPE el no reutilizar las aguas tratadas, que durante años han vertido directamente al mar. “A pesar de que los ejidatarios de Maneadero hemos solicitado la reutilización de las aguas tratadas para mejorar nuestras siembras, y al mismo tiempo evitar que el agua salada de los pozos sea invadida por el agua salada del mar, la CESPE ha decidido tirar el agua tratada de la planta de El Salitral, al arroyo San Carlos, para que nadie lo aproveche”, advirtieron los ejidatarios. Según sus cálculos, 3 mil 200 hectáreas de siembra están en riesgo, ante el desabasto de agua. Los pozos en Maneadero no han alcanzado a recuperar el agua que les es extraída, y se ha incrementado la salinidad, principalmente en los acuíferos cercanos al mar, donde el agua salada ya no es mantenida a distancia por el agua dulce y comienza a invadir los espacios. Algunos pozos, aseguran los ejidatarios, dejaron ya de funcionar, por estar completamente salados o secos, mientras que propietarios de parcelas en Maneadero se han quedado sin posibilidad de sembrar, ni de criar ganado. Algunos ganaderos de la zona refieren que han comprado agua de pozos vecinos. Sin embargo, el proceso y traslado del vital líquido les resulta muy costoso. El martes 21 de enero, los ejidatarios buscaron un acercamiento directo con el presidente municipal, Gilberto Hirata Chico, pero no tuvieron éxito. Advertían que era el cuarto intento que realizaban para poder entrevistarse con él.   “Sabemos que tiene una agenda apretada, pero ya llevamos cuatro intentos de reunión, y todas ellas nos ha cancelado, ayer por la tarde nos dijo que nos recibiría a las cuatro, después nos dijo que sería a las siete, y luego, faltando unos minutos, que sería el secretario del Ayuntamiento. No somos un juego”, aseguraron en un comunicado los ejidatarios. Chile, tomate, maíz, alfalfa, olivo, nogal, leche, queso y huevo, son algunos  de  los productos que se generan en este ejido, además de la producción de hortalizas y flores de ornato. El Ejido Nacionalista de Sánchez Taboada, es a su vez miembro de la Confederación Nacional Campesina (CNC) y de Campesinos de América Unidos. En la carta entregada el martes 21 de enero en la oficina de Hirata, se establecían tres puntos: * Una petición para que el alcalde se sume al movimiento del ejido, con el objetivo de salvar el acuífero de Maneadero, Cañón Buenavista, Esteban Cantú y del Ejido Nacionalista, “que se encuentra en grave riesgo”. De igual manera, los ejidatarios solicitan iniciar “de manera inmediata su rehabilitación”, debido a que viven la peor crisis en su historia. * Los ejidatarios piden la reparación del tramo de la carretera transpeninsular que conecta a Maneadero con la parte sur de la mancha urbana de Ensenada, debido a que “se encuentra en pésimas condiciones”. * Los pobladores de Maneadero, Cañón Buenavista (El Zorrillo) y del Esteban Cantú, todos dentro del Valle de Maneadero, no cuentan con servicio de recolección de basura. Piden entonces, apoyo para obtener una concesión de ese servicio y así solucionar el problema de tiraderos de basura clandestinos. En lo que respecta al tema agua, los ejidatarios sostuvieron el miércoles 22 de enero, una reunión con Arturo Alvarado González, director general de la CESPE, quien estuvo acompañado por el ex alcalde de Ensenada y actual subsecretario del Gobierno del Estado en el municipio, Pablo Alejo López Núñez. En dicha reunión, la CESPE aseguró que apoyarían al ejido para activar la tubería que años atrás había sido instalada precisamente para el reúso del agua que era descargada por la planta de tratamiento El Naranjo, y ya conecta Ensenada con Maneadero a través de un tubo de 30 pulgadas de diámetro color morado, que representa el agua de reúso. Durante más de cuatro años, dicha tubería había estado sin funcionar, y Alvarado solo atinó a decir que ésta se instaló, pero por alguna razón que desconoce, nunca se utilizó, al grado que algunos tramos se encuentran dañados, pero son reparables. Con esto dicho, y ante los ejidatarios, la paraestatal se comprometió a apoyarlos durante los acercamientos con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), para apresurar las autorizaciones en el reúso del agua y los estudios necesarios para analizar la viabilidad de reinyectar el agua a los pozos. La planta El Naranjo envía el agua tratada regularmente al mar, a un ritmo de 400 a 500 litros por segundo. El agua -en lo que calificaron como una primera fase a corto plazo de apoyo para el Ejido Nacionalista- sería enviada de 60 a 70 litros por segundo a través de la tubería morada, y destinada al cultivo de forraje. La parte de interconexión entre el final de esta tubería y las parcelas del ejido, será financiada por los propios ejidatarios, quienes se comprometieron que en el plazo de un mes, podrían tener montada esta conexión. La reinyección del agua a los acuíferos tendrá que pasar por una evaluación técnica y rigurosa por parte de CONAGUA, lo que deja sin claridad la fecha posible en que podría estarse logrando la recuperación en el acuífero, según dio a entender Alvarado González. Aunado a la posibilidad de comenzar a bombear agua, las autoridades conformaron un equipo de trabajo en conjunto con los ejidatarios, integrado por dependencias federales, estatales y municipales; y encabezado por la Secretaría de Fomento Agropecuario del Estado (SEFOA), dado el destino final del recurso. “Nuestro objetivo principal es salvar el acuífero”, remarcó Carrillo Huerta, presidente del comisariado. Sin embargo, los avances al momento han sido solo de palabra. Y la palabra para los ejidatarios, no es un referente que les brinde mucha seguridad. El 21 de diciembre de 1959, el entonces gobernador del Estado, Eligio Esquivel Méndez, firmó un acuerdo con el Ejido Maneadero en el salón de “La Secadora”, donde abordaron el tema del agua, que desde entonces estaba siendo demandada por la ciudad. En uno de los puntos firmados por Esquivel, asegura a los ejidatarios lo siguiente: “Toda el agua que se bombee del Valle de Maneadero, mediante los pozos que se construirán, alcanzará un gasto total de 80 litros por segundo, y parte de las necesidades se cubrirán mediante el pozo del Ejido Chapultepec. Este bombeo no será continuo, sino que nada más funcionará cuando le falte agua a la ciudad, que es más o menos durante los meses de verano, únicamente esto será hasta que el crecimiento de la ciudad obligue hacer funcionar a estos pozos, en forma continua”. Luego agrega en otro de los puntos: “Las condiciones para llevar el agua al Maneadero serán las siguientes: “a) Todo el agua que se saque de los mencionados pozos que se proponen en El Maneadero, será devuelta al Maneadero en la misma cantidad. “b) Si la influencia de los pozos que se perforen hace bajar el nivel de bombeo de los pozos cercanos, estos pozos se pararán y se regarán las tierras que dominan con el agua de Ensenada,  aparte del agua que se saque de los mismos mantos subterráneos. Los nuevos pozos continuarán trabajando para darle agua a la ciudad de Ensenada”. A la fecha, comentan los ejidatarios, siguen esperando la promesa del ex gobernador Esquivel, de regresar el agua a Maneadero. No obstante, a lo más que han llegado ha sido a ver la instalación de una tubería morada, que nunca se utilizó, y que apenas, después de la presión ejercida en los últimos días por el Ejido Nacionalista, las autoridades se comprometieron a poner en funcionamiento. Hoy viernes 24 de enero, al mediodía, funcionarios del Gobierno Federal, legisladores locales y personal de la CESPE, programaron una visita a la zona de Maneadero en compañía de los ejidatarios, con el objetivo de recorrer los puntos críticos en este problema y buscar alternativas de solución.