El Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE) carece en estos momentos de credibilidad, pues a través de los diferentes medios de comunicación, estatales y nacionales, ha mostrado una postura que jamás imaginamos se podría dar en un organismo que fue creado desde sus orígenes para defender los derechos y prestaciones de los trabajadores. Desde la caída estrepitosa de Elba Esther Gordillo Morales y su posterior encarcelamiento, por manejo indebido de las cuotas sindicales, no existe voz alguna que se atreva a enfrentar al dictador más cruel, inhumano e iletrado de que se tenga memoria en la Historia de México: Enrique Peña Nieto. El actual Líder del magisterio nacional, Juan Díaz de la Torre, parece un vocero del Presidente de México, sólo bondades ve el hombre en las Reformas Estructurales planteadas por Peña Nieto y su gobierno, minimiza las protestas que a nivel nacional han realizado los maestros de diferentes estados de la República Mexicana, destacándose la actuación de la combativa Sección 22 de Oaxaca. Con la implementación de la Ley del Servicio Profesional Docente y las modificaciones al artículo tercero Constitucional, se han pulverizado los derechos y prestaciones de los trabajadores, creando una gran inseguridad laboral en todo el país. Pues se pretende despedir a los docentes aduciendo un pobre rendimiento en la prestación del servicio docente. Emilio Chuayffet y Peña Nieto pretenden elevar la calidad de la educación despidiendo a los docentes sin otorgarles los beneficios con que, por ley, contaban todos los trabajadores. En base a un dudoso y poco confiable examen estandarizado se pretende decir a los docentes: Te vas porque los resultados obtenidos no son satisfactorios y por supuesto que no se te dará un centavo más, ya que no existe ninguna obligatoriedad por parte del Estado en virtud de las nuevas leyes en la materia. Así o más claro. Con esta medida pretenden acaba con el poder que representa el SNTE y al parecer lo están logrando, ya que los actuales líderes nacionales y seccionales se encuentran amedrentados con seguir la misma suerte que Elba Esther Gordillo Morales. Alguien dijo y dijo bien: “Para poder hablar hay que tener la lengua suelta y la cola corta” y hay algunos que la tienen más larga que una rata, que me dispensen las ratas si las ofendí. Es inverosímil que nuestro propio sindicato censure las protestas del Magisterio a nivel nacional, éstas se han dado ante el hartazgo de los maestros de base, que ven irse por el caño su futuro laboral, personal y profesional, pues este gobierno tiene la consigna de someternos utilizando el “terrorismo laboral”, utilizando a una persona con visibles afectaciones psicológicas, pues solo de esta manera se explica el odio exacerbado que Emilio Chuayffet, Secretario de Educación, prodiga a los maestros, a tal grado que se le compara con un ente del “mal”. En el colmo de la desfachatez de nuestros líderes, se convoca a nivel nacional a los Juegos Magisteriales entre octubre y noviembre, “como si el horno estuviera para bollos”. Posterior a esta estrategia se nos convoca a una dudosa credencialización en la que prácticamente se nos amenaza de que si no nos tomamos la foto para la nueva credencial no tendríamos derecho a préstamos, constancias, trámite de pensiones o jubilaciones o cualquier otra gestión. Es inaceptable que nuestro propio sindicato nos amenace para la credencialización. La gran mayoría de maestros no se tomaron la foto por no tener la certidumbre del uso que se dará a la misma y a la firma que habremos de dar para fin de que nos sea entregada. La burra no era arisca, los chin… la hicieron. Francisco Heredia Guzmán Tijuana, B. C. Teléf. 66 4 4 10-86 62 francisco_heredia_guzman@hotmail.com