El primero de diciembre de 2012 marcó el regreso del PRI en la figura de Enrique Peña Nieto, desde ese día los mexicanos han sido testigos del retorno del autoritarismo, prueba de ello es que en ninguna de las acciones reformatorias, el mandatario ha consultado a los actores sociales que se ven involucrados en las acciones. Llega con el descontento no solo social (el tema de inseguridad sigue igual que cuando, el ex presidente Felipe Calderón, pero además se oculta), sino del sector educativo debido a que la Reforma Educativa es la que más polémica ha provocado, los maestros aún siguen en su lucha. Los empresarios tampoco han sido consultados en el torno al rubro hacendario, y les afecta en el tema de deducciones y el aumento de impuestos, que los llevará a generar menos empleos. Por si fuera poco, en la frontera homologa el IVA al 16 por ciento, lo que no fue bien visto por los habitantes de la región. Así pues, a un año de llegar Peña Nieto a la silla presidencial, la página de la presidencia ofrece un informe de lo que ha logrado hasta el momento. Establece que la autoridad está trabajando en cinco metas nacionales, mismas que delineó desde el inicio: – Un México en paz, donde las familias mexicanas sean el centro de las políticas y programas de seguridad. – Un México Incluyente, donde la pobreza extrema y el hambre se superen y dejen de ser obstáculos para el pleno desarrollo de nuestra nación. – Conseguir un México con Educación de Calidad para Todos, donde los niños y jóvenes reciban las herramientas que necesitan para escribir su propia historia de éxito. – Alcanzar un México Próspero, donde todos los mexicanos aporten y se beneficien de un crecimiento económico acelerado, sostenido y sustentable. – Hacer de México un Actor con Responsabilidad Global, que sea una voz positiva y propositiva en el mundo, en beneficio de las mejores causas de la humanidad. Cabe mencionar el documento establece que en el primer año de gobierno se han tomado decisiones trascendentes como son las diferentes reformas, educativa, Telecomunicaciones, financiera, hacendaria y la que todavía está pendiente, la energética. Para finalizar, retoma una cita del primer informe de gobierno el pasado 2 de septiembre. “Tenemos claridad de rumbo. Tenemos la energía y determinación para mover y transformar a nuestro país… tenemos la oportunidad de escribir una historia de valor, esfuerzo y éxito. Es hora de creer. Juntos, hagamos historia”.
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